En medio de la transición hacia el pago electrónico en Cuba, surgen preocupaciones sobre las deficiencias en el sistema y su impacto en las familias que dependen de él.
El uso de tarjetas magnéticas como forma de pago ha sido implementado debido al déficit de efectivo en los bancos, pero persisten problemas que afectan a la población, dejándola en una situación de limbo salarial, según denunció en Facebook el guantanamero Alex Leyva Galano.
"Es lamentable que se hable de banca remota cuando no contamos con la infraestructura suficiente para ejecutar el pago salarial por tarjetas magnéticas", expresó. "Si bien antes no podíamos cobrar en efectivo, ahora las transacciones digitales se retrasan, dejando mucho que desear en el estado de opinión de la población".
La falta de previsión y la falta de aterrizaje en la realidad cubana son cuestionadas, ya que los responsables de estas actividades y cambios parecen no haber considerado las consecuencias y dificultades que enfrentan los ciudadanos comunes.
"Se habla de avance tecnológico y, aunque no estoy en contra de ello, la realidad es que sin una infraestructura adecuada, ¿cómo se puede avanzar en la implementación de un sistema de pago que no funciona como debería?", cuestionó Leyva Galano.
La situación planteada por Leyva Galano genera interrogantes sobre la planificación y la necesidad de abordar las deficiencias en el sistema de pago electrónico, con el fin de garantizar una transición efectiva y sin contratiempos para el bienestar de la población cubana.
En otras localidades del país se vive una crisis similar, con cajeros automáticos sin dinero, sistemas digitales que no funcionan a locales comerciales que no están enteradas sobre las distintas formas de pago.
Residentes en Baracoa denunciaron que pasan largas horas en una cola cola durante para cobrar su salario o pensión, ante la falta de efectivo en sucursales bancarias.
La crisis obligó a las autoridades de Sancti Spíritus a limitar la cantidad de dinero que pueden extraer los trabajadores privados, de mipymes, cuentapropistas y cooperativas no agropecuarias.
Ladys Mora García, subdirectora del área contable en la Dirección Provincial del Banco de Crédito y Comercio (Bandec), consideró que la medida permitirá mejorar el servicio y que dure “un poco más la disponibilidad de efectivo”.
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