Cubanos asisten a misas y bendicen sus mascotas en el Rincón de San Lázaro en Hialeah

Residentes cubanos en Florida asistieron este sábado a celebrar misas y bendecir a sus mascotas en el Rincón de San Lázaro en Hialeah, en la víspera de la festividad del santo milagroso y sanador.

Las intensas lluvias que cayeron la víspera sobre Hialeah y otras localidades de Florida frenaron un poco la participación de los fieles. No obstante, un nutrido grupo de ellos se acercó a la iglesia ubicada en 1190 E 4th Ave para mostrar su devoción por el “Viejo”.

Como ocurre cada año, tanto el día anterior como el propio 17 de diciembre, cuando se celebra la festividad del santo, los cubanos acuden en masa a este templo para darle las gracias por algún milagro o deseo concedido, o a hacerle alguna petición.

Flores, incienso y velas fueron ofrendados al santo venerado por los cubanos como Babalú Ayé en la religión afrocubana. La misa se celebró a las cinco de la tarde, oficiada por el sacerdote Bárbaro González, quien poco después procedió a bendecir las mascotas de los fieles.

Este domingo, la Iglesia del Rincón de San Lázaro en Hialeah celebrará misa a las 10 de la mañana, a las 12:30 p.m. y a las 6 p.m. Dos horas más tarde, se realizará una procesión en honor al santo.

Mientras esto sucede en Hialeah, una vez más en La Habana se congregaron miles de personas para venerar al santo milagroso. Las lluvias caídas el sábado en la capital no impidieron la peregrinación de cubanos hacia el Santuario Nacional de El Rincón, en vísperas de la celebración de San Lázaro.

Otras miles de personas acudieron desde la medianoche del viernes hacia el Santuario Nacional de San Lázaro, en El Rincón de Santiago de Las Vegas, para pagar promesas hechas al santo, darle gracias, hacerle un pedido o simplemente rendirlo tributo.

Aunque el día amaneció con una fina llovizna en el poblado de Santiago de Las Vegas, cientos de personas caminaron desde antes de la madrugada hacia el lugar, donde los creyentes le entregaron al santo sus ofrendas en pago a una promesa, o le pidieron su milagrosa intercesión para asuntos de su vida y salud.