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Modesto Agüero denuncia censura en Cuba: "No respetaron mis 40 años en la televisión"

El narrador opina que la televisión cubana lo censuró porque vive en España. "El paso más importante que he dado en mi vida fue venir a vivir a este gran país".

Modesto Agüero narrando un juego del equipo Cuba de béisbol para la televisión cubana © Facebook / Modesto Agüero Yabor
Modesto Agüero narrando un juego del equipo Cuba de béisbol para la televisión cubana Foto © Facebook / Modesto Agüero Yabor

Modesto Agüero, una de las voces más importantes de la narración deportiva en Cuba y ya jubilado, denunció que la televisión cubana suprimió su narración de la Copa del Mundo de Sóftbol por el simple hecho de que vive en España.

Modesto reside desde hace siete años en el país europeo, donde continúa su labor profesional en la liga femenina de sóftbol.

Según dijo en su perfil de Facebook, el año pasado la Confederación Mundial de Béisbol y Sóftbol (WBSC) lo contrató para narrar la transmisión en español de los juegos del Grupo de Valencia clasificatorio para el Campeonato Mundial de Sóftbol femenino de 2024.

Ello representó una alegría doble para él, no solo porque una prestigiosa organización que rige el béisbol y el sóftbol a nivel mundial lo escogiera, sino porque en ese grupo de Valencia estaba Cuba y así lo podrían escuchar narrando de nuevo en su país.

"Cuál sería mi sorpresa y también mi disgusto al saber que en Cuba quitaron mi narración y lo narraron en La Habana. No respetaron los 40 años como narrador-comentarista deportivo en la TV Cubana, con ocho Olimpíadas (solo René Navarro y yo tenemos esa cifra de Juegos Olímpicos), además de Juegos Panamericanos, Centroamericanos, Campeonatos Mundiales y Copas de Béisbol, Boxeo y Voleibol, etc", detalló.

"¿Por qué quitaron mi narración, porque vivo en España? Les digo que el paso más importante que he dado en mi vida, lo di hace siete años y fue venir a vivir a este gran país, donde estoy considerado el principal narrador por la Real Federación Española de Béisbol y Sóftbol". concluyó.

Captura de Facebook / Deportes por Modesto Agüero

Nacido en 1951, Modesto Agüero se marchó de Cuba tras jubilarse con su esposa para reencontrarse con sus hijas en España. A pesar de tener más de 65 años, comenzó una nueva vida y tuvo la suerte de poder retomar su profesión, algo que no todos logran, especialmente a esa edad.

Distinta suerte ha corrido su excompañero René Navarro, legendario comentarista deportivo de la televisión cubana que también ostenta el récord de haber narrado ocho Olimpíadas.

El veterano locutor, con 79 años y retirado desde 2005, admitió en enero que tras jubilarse se las vio tan difícil económicamente que debió vender su carro para no morirse de hambre. Advirtió, además, que su situación económica no ha mejorado.

"Yo ganaba 430 pesos como jubilado, y cuando vinieron las famosas leyes nuevas subí a 1,700 y algo más. Creo que 1,733. ¿Qué se hace con 1,733 pesos después de tantos años de trabajo? Esa jubilación es injusta y afecta a muchísimas personas, incluida buena parte de las glorias del deporte", cuestionó en una entrevista.

"En cuanto a la gasolina, renuncié a ella y el carro lo vendí para no morirme de hambre. No tenía cómo mantener una familia con tan poco dinero. Así que la situación persiste", añadió.

El popular comentarista sufre la crisis igual que cualquier cubano de a pie.

En 2020, agobiado por las dificultades y escaseces diarias, afirmó que le gustaría vivir los años que le quedan de vida de una manera más tranquila.

El locutor dijo que situaciones como estas sucedían con frecuencia en los bancos, oficinas de la vivienda, notarías, dependencias de la seguridad social, así como en otras entidades estatales que brindan servicios a la población.

"Los viejos de 70, 75, 80 y más años desearíamos vivir los contados almanaques que nos restan un poco más tranquilos y NO sometidos a largas horas de espera para cualquier gestión", lamentó.

En otras ocasiones, Navarro se ha quejado por el trato que se le ha dado a un profesional como él en la Isla.

En entrevista con Julita Osendi para CiberCuba en 2019, señaló que su jubilación es irrisoria después de 43 años trabajando, 38 de ellos en el ICRT.

"No puedes imaginar lo mal que me sentí al jubilarme. Permanecí en mi casa como un lobo solitario…¡ah! Porque de contra se demoraron dos meses en pagarme mi miserable retiro", denunció.

"Tuve que salir a vender botellas y pomos plásticos para apoyar la alimentación de la casa pues mi señora también se tuvo que jubilar por serios problemas de enfermedad. No puedes imaginar, ni por un momento, lo que pasamos", agregó.

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