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En su mensaje navideño de 2024, los obispos católicos de Cuba invitaron a los cubanos a renovar la fe y rezar por el país, destacando un profundo anhelo de libertad, reconciliación y justicia.
A través de su perfil oficial de Facebook, la Diócesis de Santa Clara difundió el mensaje que aborda las realidades difíciles que enfrenta el pueblo cubano y ofrece un mensaje de fe y esperanza.
En la festividad de Nuestra Señora de la Esperanza, este 18 de diciembre, los obispos católicos de Cuba compartieron su tradicional mensaje de Navidad titulado “Nos visitará el sol que nace de lo alto”, inspirado en el evangelio de Lucas 1, 78.
Con este llamado, los obispos buscan inspirar a los cubanos a renovar la fe y la esperanza, alentándolos a reflexionar sobre el poder transformador de la llegada de Jesucristo en sus vidas personales, familiares y sociales.
“En nuestros corazones hay un anhelo profundo de amor y paz, de perdón y reconciliación, de verdad y justicia, de libertad y prosperidad”, señalaron los obispos, subrayando que para colmar estos deseos es necesario “dejarse encontrar por Jesucristo”.
Este llamado a la reflexión y la oración se presenta como un punto de partida para enfrentar las dificultades cotidianas con ánimo renovado.
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El texto destaca que, en medio de las dificultades actuales, los obispos consideran la Navidad como una oportunidad para renovar el ánimo y la esperanza. Invitaron a las familias cubanas a reflexionar sobre los valores de solidaridad y servicio, promoviendo acciones caritativas y comunitarias que fortalezcan los lazos sociales.
En el texto se recordó el llamado realizado en abril pasado a rezar por Cuba en todas las misas, en la adoración al Santísimo y en la oración personal: “La oración tiene el poder de transformar los corazones y las realidades de muerte”.
Los obispos también invitaron a perseverar en esta práctica como un servicio esencial que la Iglesia puede ofrecer al pueblo, sobre todo en los tiempos actuales de crisis y escasez.
Este año, la Navidad coincide con el inicio de un Año Jubilar convocado por el Papa Francisco bajo el lema “Peregrinos de Esperanza”.
En este contexto, los obispos llamaron a experimentar el poder de la misericordia divina y trabajar juntos para construir una nación donde todos vivan como hermanos.
“Ya cercana la Navidad, como pastores del pueblo de Dios, queremos hacer llegar a las familias cubanas un mensaje de cercanía y aliento ante las difíciles realidades que, muchas de ellas, tienen que afrontar cada día”, afirmaron, pidiendo la intercesión de la Virgen María y San José para traer esperanza en medio de las tinieblas.
Concluyeron deseando a los cubanos una “Feliz Navidad”, recordando que el nacimiento de Jesucristo trae esperanza para todos los pueblos, y reafirmaron su compromiso de acompañar al pueblo en la oración y las obras de caridad.
Es tradición que cada diciembre los obispos cubanos compartan un mensaje de esperanza, ofreciendo consuelo espiritual en un contexto marcado por el agravamiento de la crisis económica en el país.
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