Una misma funcionaria del Ministerio de Comunicaciones de Cuba que arremetió con furia contra el embajador de Estados Unidos, Mike Hammer, en la televisión nacional, pidió públicamente, días antes, que los cubanos donen divisas para “salvar a ETECSA”.
Tamara Dovale Moisés, con un discurso militante y de defensa a ultranza del gobierno cubano, llamó “hipócrita”, “monstruo” y “representante del país más criminal del planeta” al diplomático estadounidense en una intervención transmitida por el Noticiero de la Televisión Cubana, donde también culpó al “bloqueo” de todos los males que padece el país.
“¿Qué puede representar él, un monstruo? Porque, ¿qué cosa es Estados Unidos si no es un monstruo que nos está ahogando? [...] Quiere que el pueblo se subleve, que tumbe al gobierno... pero nosotros vamos a seguir resistiendo”, dijo la funcionaria, entre gestos de indignación.
Sin embargo, apenas días antes, Dovale publicó en su cuenta de Facebook una petición que ha generado desconcierto: propuso que los cubanos, dentro y fuera de la isla, hagan donaciones en dólares o euros a una cuenta de ETECSA para ayudar a la empresa estatal a comprar baterías de respaldo y mantener el servicio de telefonía e internet móvil.
“Y si todos donáramos un aporte de divisas, el que pueda, claro [...] desde 1 dólar hasta lo que pueda, a una cuenta de ETECSA, para que pueda comprar baterías de respaldo, radiobases, etc. [...] Salvar a ETECSA es pensar como país”, escribió la funcionaria.
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La propuesta contrasta de forma cruda con su encendida condena a Estados Unidos y al sistema capitalista. Mientras califica de “abusador” y “terrorista” al país norteamericano, pide ahora el dinero de los cubanos, muchos de ellos residentes en ese mismo “monstruo”, para sostener los servicios de una empresa pública cuestionada por sus altos precios y su baja calidad.
Dovale intenta justificar los costos de ETECSA con un ejemplo singular: el precio de una “tortita” en la calle. “6.5 GB por 360 CUP o 5 torticas. Ponte y piensa”, escribió, en referencia al paquete de datos móviles que ofrece la compañía. La comparación fue recibida con ironía por muchos internautas, quienes cuestionan que un servicio básico de telecomunicaciones sea defendido como si fuera un lujo culinario.
La funcionaria también alertó sobre el riesgo de que ETECSA colapse como la Unión Nacional Eléctrica (UNE), dejando sin internet a zonas enteras durante los apagones, lo cual, según afirma, ya ocurre en territorios como Pinar del Río por la falta de insumos “que cuestan muchas divisas adquirir”.
La súplica ha generado una ola de críticas en redes sociales, donde muchos cubanos señalaron la contradicción de atacar con tanta vehemencia a Estados Unidos mientras se recurre al bolsillo de quienes viven en ese país para sostener un sistema que no ofrece respuestas, pero sí exigencias.
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