Los jueces de La Voz España se rindieron, este martes, ante el talento musical de una singular figura en la última ronda de audiciones a ciegas. Esta vez, Antonio Orozco giró sus silla por Mar Valdés, nieta de Chucho y bisnieta de Bebo.
La cantante cubana nacida en la ciudad de Fuerteventura, Islas Canarias, cantó “Mans world” y demostró su potencialidad.
Antes de su presentación Mar Valdés declaró que la música siempre estuvo presente en su vida, desde que estaba en el “vientre de su madre” y afirmó, además, estar orgullosa de ser “parte de esa dinastía” musical.
“Se me eriza la piel por decir que soy nieta de Chucho Valdés y bisnieta, de Bebo Valdés”, añadió la cubana.
No obstante, afirmó querer abrirse un camino por sí misma, dentro de un mundo donde por “tener un apellido pesado” no se valora el esfuerzo propio. Para Mar, estar en La Voz representa la realización de un “sueño profesional” y una “necesidad propia” de autodeterminarse.
La actuación fue tan cautivadora que logró levantar de su asiento a Antonio Orozco -su nuevo coach- , quien se apresuró en abrazar a la cantante. Seguido, luego por el resto de los jueces la mexicana Paulina Rubio, el puertorriqueño Luis Fonsi y el español Pablo López y Antonio Orozco. Todos aplaudieron el talento de la joven de 21 años.
"Contigo acaban las audiciones y empieza la vida", expresó Orozco.
Minutos antes de su entrada al escenario, la joven cantante recibió un mensaje especial de parte de su abuelo quien le deseó “mucho éxito”.“Tu sabes que yo siempre te ha apoyado y te he querido mucho y sé que tienes un gran talento”, declaró el ganador en múltiples ocasiones del premio Grammy.
Por último, Mar culminó su audición afirmando que “este mundo sin mujeres, no es nada”.
Este no es el primer paso de la cubana dentro del mundo profesional de la música. En junio del pasado año, la cantante lanzó un tema de su autoría bajo el título de "Carry me home".
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