Poco duró la estatua de bronce del futbolista argentino Lionel Messi, inaugurada en junio de 2016 en el Paseo de la Gloria (Buenos Aires).
Un acto vandálico ha dejado la escultura completamente mutilada: sin torso, ni brazos, ni cabeza.
De momento, las autoridades investigan lo sucedido, a la vez que ya han comenzado las labores de reparación.
El jugador del Barça había recibido la escultura como reconocimiento y gesto de cariño, justo después de perder la final de la Copa América y anunciar que por ese motivo abandonaba la selección argentina.
En aquella oportunidad, el jefe del Gobierno de la ciudad, Horacio Rodríguez, aseguró: “es muy oportuna la inauguración de su estatua y es la única manera de pedirle que vuelva y nos ayude a ganar el mundial".
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