Caminar por La Habana en estos días puede deparar sorpresas. En la esquina menos pensada, usted puede toparse con un centenar de personas que custodian, con celo, los secretos de la filmación de la octava parte de Rápido y Furioso, una de las películas más taquilleras de los últimos tiempos.
Hace unos días, algunos cubanos supieron de los entrenamientos que, en una calle muy apartada del centro, desarrollaron los miembros del equipo que se encargan de las riesgosas acrobacias características de esta saga, reconocida mundialmente por sus carreras repletas de adrenalina y las aparatosas estrategias de efectos especiales.
Hoy –cuando el rodaje en Cuba ya es una realidad- algunas fuentes cercanas a la producción han confirmado que las principales locaciones en La Habana serán el Parque Curita, las calles Reina y Cárdenas, el Parque la India, Prado, Malecón y la Loma del Ángel.
Todo parece indicar que en este último sitio comienza la trama que hilvana la historia de la octava parte de Rápido y Furioso, programada para su estreno en abril de 2017 según confirmó Vin Diesel en su perfil oficial de Facebook.
Desde hace tres días, Michelle Rodríguez y Vin Diesel se encuentran en Cuba como han dado a conocer en las redes sociales, alojados en el Hotel Meliá Habana y la Inmobiliaria Atlantic, respectivamente.
Mientras en Malecón y G –justo en el conocido Estadio Martí- se ha establecido un campamento de base para alojar ahí una decena de camiones señalados como Hollywood Trucks, y hasta el momento, un helicóptero.
Esta nueva película de Rápido y Furioso estará dirigida por F. Gary Gray (The Italian Job 2013), quien se ha hecho acompañar de un equipo de talentosos productores y asistentes de dirección estadounidenses, mexicanos y cubanos, con alrededor de mil locales en la unidad que representa a la Isla caribeña.
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