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Responsabilizan a un médico cubano en Venezuela de la muerte de una joven durante una cirugía estética

La joven venezolana vivía en Panamá, pero viajó a su país para someterse a una lipotransferencia.

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Este artículo es de hace 4 años

Delfín Miguel Argote Guerrero, un médico de nacionalidad cubana, ha sido señalado como presunto responsable de la muerte de una joven de 22 años durante una cirugía estética practicada en una clínica de Caracas, Venezuela.

Johana Solsiré Martínez Rodríguez residía en Panamá desde hacía dos años, pero según indican medios de prensa venezolanos, viajó el lunes a Caracas para someterse a una lipotransferencia y tenía previsto regresar luego a territorio panameño.

Franyelis Rodríguez, hermana de la víctima, ha declarado que Johana fue trasladada al quirófano a las 11:30 am de este martes en el Centro Médico Ambulatorio "Iboma", ubicado en una céntrica avenida de Caracas.

Estaba estimado que la intervención tuviera una duración aproximada de tres horas, pues era una lipotransferencia del abdomen a glúteos y senos, una operación calificada de bajo riesgo y que no debía durar más del tiempo indicado.

Sin embargo, sobre las 5 de la tarde, y ante el desespero creciente de la familia, la secretaria del consultorio los puso en contacto con una enfermera, que le dijo que durante la intervención se había presentado un problema.

Les explicaron que Johana había sufrido una arritmia cardíaca y que estaba siendo estabilizada para trasladarla hasta una Unidad de Cuidados Intensivos de un centro médico cercano.

Minutos después arribaron al lugar dos funcionarias de la policía científica, que tendrían algún vínculo familiar con el médico cubano, según ha indicado la hermana de la víctima.

Las detectives, miembros del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, entraron al quirófano y se llevaron del lugar al médico cubano. Aseguran que no iba esposado y que no parecía que se tratase de una detención.

Johana Solsiré Martínez sufrió cuatro paros respiratorios, pero no consiguió sobrevivir al último y habría fallecido sobre las 6:40 pm (hora local) del martes.

La joven habría pagado unos 3.800 dólares por la cirugía y se había realizado los exámenes preoperatorios en Panamá, donde había obtenido la residencia y trabajaba en una discoteca como mesera. Johana deja huérfano a un niño de seis años de edad.

Los parientes de la víctima insisten en denunciar que los funcionarios venezolanos intentan amañar el caso para proteger al médico cubano, y exigen que sea llevado a prisión.

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