APP GRATIS

El legado del Padre Olallo, segundo beato cubano

El primer beato cubano es Fray José López Piteira, nacido en Cuba de padres inmigrantes españoles. Su beatificación se realizó en Roma, en 2007.

Padre Olallo, segundo beato cubano © Web Iglesia cubana
Padre Olallo, segundo beato cubano Foto © Web Iglesia cubana

Este artículo es de hace 1 año

Fray José Olallo Valdés (Padre Olallo) es el segundo beato cubano y su legado mayor fue como protector de los enfermos y los necesitados.

La beatificación del Padre Olallo fue la primera realizada en Cuba y tuvo lugar el sábado 29 de noviembre del 2008, a las 8:00 am, en la Plaza de la Iglesia de la Virgen de la Caridad, en Camagüey.

Camagüey, Beatificación del Padre Olallo / Cuba Encuentro

La Eucaristía y la Beatificación fue presidida por el cardenal José Saraiva Martins, quien actuó como enviado especial del Papa Benedicto XVI. La misa fue concelebrada por monseñor Juan de la Caridad García Rodríguez, Arzobispo de Camagüey.

Padre Olallo fue el primer cubano cuya beatificación se realizó en Cuba. Sin embargo, es el segundo beato cubano. Su legado destaca por la dedicación de su vida al servicio de los enfermos. Era un religioso de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios.

El primer beato cubano es Fray José López Piteira, nacido en Cuba de padres inmigrantes españoles. Su beatificación se realizó en Roma, en 2007. Se le considera una víctima del comunismo, en la Guerra Civil en España. Fue asesinado el 30 de noviembre de 1936 junto con otros 50 agustinos, en Paracuellos del Jarama, en las afueras de Madrid.

¿Quién fue José Olallo Valdés?

José Olallo Valdés nació el 12 de febrero de 1820. Teniendo un mes de nacido, lo dejaron en la Casa-Cuna de San José de la Habana. El 15 de marzo de ese mismo año fue bautizado.

El bebé creció bajo la educación de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paúl. En su adolescencia su voluntad de servir a Dios y de atender a los menesterosos lo llevó a entrar en la Orden de los Hermanos San Juan de Dios.

Hizo su profesión religiosa a los 15 años y fue destinado al Hospital de San Juan de Dios de Puerto Príncipe. En esta institución camagüeyana completó su formación religiosa y profesional. Era enfermero, con conocimientos de cirujano y farmacéutico.

El Padre Olallo afrontó el tratamiento de pacientes en muchas epidemias que azotaron Camagüey en su tiempo, la última fue la viruela que redujo considerablemente la población de Puerto Príncipe a fines de 1888. Murió el 7 de marzo de 1889, por un aneurisma de la aorta abdominal, pero sin haber abandonado sus labores. El pueblo camagüeyano asistió masivamente a su funeral en el Cementerio General.

Obispos cubanos resaltaron el legado del Padre Olallo

Pocos días antes de la beatificación de Fray José Olallo Valdés, los obispos de Cuba publicaron un mensaje para pedir a los cubanos aprender la lección de caridad y amor a Dios del religioso beatificado.

"Anhelamos que el ejemplo de santidad del Padre Olallo despierte en todos los cubanos el deseo de volverse hacia Dios y permanecer en él, que afiance en cada uno la decisión de ir con María al encuentro de Jesucristo pues Él es el rostro del verdadero amor vivido por el Padre Olallo y que recibe el nombre de caridad, el mismo de nuestra Madre del Cobre, la que nos une y nos salva como personas y como pueblo", afirman los obispos.

El mensaje recuerda que el Padre Olallo hizo del hospital en el que trabajaba "una gran familia de hermanos a pesar de las múltiples diferencias de sus pacientes".

Recordaron que como hombre de fe, el Padre Olallo "oraba mañana, tarde y noche, recorría la Calle de los Pobres ayudándolos material y espiritualmente, auxiliaba a los presos, daba comida a los hambrientos y evangelizaba mediante sus famosas tertulias nocturnas por las que educó a muchos en la fe".

Los obispos pidieron a los cubanos que sepan "valorar el gran amor con el que tantos padres y madres cuidan con esmero a sus hijos discapacitados; tantos buenos hijos a padres o tantas personas prestan alegre y espontáneamente su ayuda al prójimo".

"¡Que el ejemplo de caridad paciente y heroica del Padre Olallo nos ayude a todos, pero de manera especial a aquellos que tienen el delicado servicio de promover el bien común para que lo hagan con espíritu de justicia favoreciendo así la convivencia fraterna entre todos los cubanos!", señalaron.

¿Qué opinas?

COMENTAR

Archivado en:


¿Tienes algo que reportar?
Escribe a CiberCuba:

editores@cibercuba.com

 +1 786 3965 689


Siguiente artículo:

No hay más noticias que mostrar, visitar Portada