La dirección del Partido Demócrata Cristiano de Cuba, con sede en Miami, aceptó participar en el proceso de debate del proyecto de la nueva Constitución cubana.
“Vamos a participar, aunque aclaramos que tenemos muchos desacuerdos con el proceso seguido e incertidumbres sobre su futuro, además discrepamos de manera contundente con cuestiones de fondo, como el no permitir el pluripartidismo, su visión limitada de los derechos humanos y la permanencia de la pena de muerte”, dijo en un comunicado, Andrés Hernández, presidente de la organización.
“Con ello no estamos legitimando ningún proceso del gobierno, sino ejerciendo un derecho que como cubanos hasta ahora nos ha sido vetado”, agregó.
Esta semana la prensa oficialista anunció que los cubanos residentes en el exterior podrían participar en el debate del proyecto de reforma de la Constitución.
Según explicaron, la web Nación y Emigración del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex) estará habilitada para ello a partir de la primera semana de septiembre. Habrá una planilla para dejar las propuestas, modificaciones y comentarios.
La noticia ha causado gran revuelo en la comunidad cubana del exilio pues es la primera vez en 60 años que el Gobierno de la Isla permite a los cubanos residentes en el extranjero opinar sobre algún tema.
El PDC es la primera organización fuera de la Isla que acepta públicamente la invitación. En el comunicado dijeron que en las próximas semanas darán a conocer sus criterios y propuestas.
Asimismo aclararon que muchas de ellas ya "han sido transmitidas en la Mesa de Unidad de Acción Democrática (MUAD), de la cual forma parte y que está elaborando una propuesta de reforma constitucional alternativa".
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