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Preocupación en el Gobierno por los cuentapropistas: “Les damos cita y no vienen”

En Sancti Spíritus, de los más de 12.000 cuentapropistas inscritos, un poco más de 7.000 han ido a actualizar sus datos.

Negocio privado © CiberCuba
Negocio privado Foto © CiberCuba

Este artículo es de hace 5 años

Un gran número de cuentapropistas no han acudido aún a actualizar sus datos en las direcciones de Trabajo y Seguridad Social, trámite que solo podrán realizar hasta el próximo 7 de marzo, de acuerdo al plazo que otorgado por el Gobierno.

Jeannette Casanovas Cosío, subdirectora de empleo de la DPT en Camagüey, explicó al periódico local que al principio los citaban para un día específico, pero ellos no iban.

“Esto hace muy compleja la situación porque es mucho el volumen de información a procesar. Nosotros realizamos varias acciones de capacitación, entregamos gratuitamente las normas y todavía se percibe desconocimiento de la Ley”, dijo.

Según el reglamento que rige la actividad económica no estatal, contenido en la Resolución número 11 de 2018 de la ministra de Trabajo, aquellos emprendedores que 90 días después de su entrada en vigor (el 7 de diciembre) no hayan actualizado sus fichas perderán su licencia, lo cual será reportado automáticamente a la Oficina Nacional de Administración Tributaria.

“Al ritmo diario que planificamos desde el comienzo para cada una de las oficinas daba tiempo para concluir el proceso antes del 7 de marzo. Hoy disponemos de menos de un mes y aún el número es considerable, por eso el llamado es a que acudan a nuestros distritos y direcciones municipales y no dejar que siga pasando el tiempo”, recalcó la funcionaria.

En Sancti Spíritus la situación es similar. Allí, de los más de 12.000 cuentapropistas inscritos, un poco más de 7.000 han cumplido lo dispuesto en la ley.

Gustavo Alcántara Benítez, subdirector provincial de Atención y Control al Trabajo por Cuenta Propia, denunció al semanario Escambray que no se avanza al ritmo deseado pues los convocados incumplen los cronogramas previstos, a pesar de que se les cita por varias vías.

“Igualmente se establecieron cuatro prioridades: las personas que ejercen más de una actividad, para discernir que sean compatibles las labores a ejercer; las actividades que se modifican o integran; los trabajadores contratados y, por último, los conexos del transporte, es decir, los poncheros, chapisteros, fregadores, entre otros”, explicó.

Previendo una avalancha innecesaria en los últimos días, el funcionario recordó que aquellos trabajadores subcontratados deben presentarse junto con el titular de la licencia y mostrar el contrato, en el cual se deben definir el régimen de trabajo y las vacaciones, las normas de seguridad, las formas de pago y las necesidades y exigencias de ambas partes.

Precisamente, estos subempleados, junto con los gastronómicos, son los más rezagados en la provincia.

Actualmente ejercen la iniciativa privada en Cuba 588.000 personas, quienes representan el 13 por ciento de la fuerza laboral activa del país, y cuyo aporte a la economía nacional creció en un 16 por ciento en 2018.

El pasado 7 de diciembre comenzaron a aplicarse las nuevas regulaciones del sector, las cuales fueron modificadas de improviso solo dos días antes.

Ante la presión social, el Gobierno de Díaz-Canel se vio obligado a permitir a las personas ejercer más de una actividad y a eliminar el límite de 50 capacidades en los negocios gastronómicos. Dichas medidas, según el mandatario, fue una rectificación, no constituyeron “retrocesos” ni “debilidades”.

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