El pasado 20 de abril varios miembros de la Asociación Culinaria de Cuba en Camagüey elaboraron una selección de recetas tradicionales de la religión yoruba, cada una de ellas dedicada a su santo.
El Festival Olorum es un evento de la cultura africana en Cuba
La presentación de estos platos se realizó en el marco del Festival Olorum, que promueve y fomenta la danza folclórica. Esta IX edición estuvo dedicada a Nigeria y coincidió con el III Evento Nacional de la Religión Yoruba.
Reinaldo Echemendía Estrada, presidente del Festival Olorum, explicó en entrevista al periódico Adelante, que lo yoruba como cultura va más allá del sistema religioso llamado santería cubana.
En este sentido Camagüey abre el diapasón e incorpora otras expresiones culturales, como el arte culinario, pues tiene un papel protagónico en las ceremonias religiosas yorubas.
Se elaboraron 24 platos que se ofrenda a las deidades africanas
Los cocineros invitados a participar en el III Evento Nacional de la Religión Yoruba, elaboraron con respeto recetas tradicionales que se ofrendan a los santos. Fueron presentadas en La Cúpula del centro de convenciones Santa Cecilia.
A Orula dedicaron una gallina condimentada con azúcar prieta, dorada en aceite caliente y terminada en salsa, acompañada con bolas de ñame sazonadas con distintos ingredientes, más pescado frito con salsa sobreuso.
A Oshún le elaboraron un Ochinchin. Consiste en un revoltillo de huevos, con acelga y camarones, pero al que no se coloca nada de sal. Además presentaron para esta diosa un arroz con camarones y codornices en salsa.
Para Elegguá prepararon pollo asado al horno y sopa de quimbombó. A Yemayá se le ofrendó un chilindrón de carnero, como a Babalú Ayé, pero el de él con quimbombó y acompañado de ensalada de frijol negro.
Shangó fue agasajado con harina de maíz con quimbombó y Oyá con berenjena empanizada. El postre estuvo dedicado a Obbatalá, con un arroz con leche.
El periódico Adelante destaca que esta presentación de platos de las distintas deidades del culto africano es una muestra del interés de los cocineros locales por estar presentes en la cultura y la historia camagüeyana y cubana.
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