La unidad empresarial de base (UEB) Frutales Ceballos, en la provincia de Ciego de Ávila, ha anunciado que prepara dos nuevas líneas de procesamiento de concentrados y pulpas frutales para su exportación a Europa en julio, ante la dificultad para insertarse en el mercado internacional con las frutas frescas.
Sobre la reciente exportación de mangos frescos a los países europeos, Domingo Escalante Pérez, director de Comercio Exterior en Ceballos, reconoció que el país tiene serias dificultades para colocarse en el mercado europeo donde la competencia tiene altos estándares.
“Se hace muy difícil sostener las exportaciones del fruto; no solo porque los envíos son en avión, sino por todas las atenciones que implica el proceso y por el fuerte mercado competitivo que ya tiene en la región”, dijo al medio oficialista Invasor.
El mismo problema enfrentan las autoridades del país para exportar plátanos, por lo que ahora prevén venderlos en pulpa.
“Igual nos pasa con los platanitos de La Cuba, estamos previendo exportarlo como pulpa y aprovechar las capacidades y calidad fabril de la industria, sin renunciar a pequeños intentos por introducirnos en el renglón de los frescos”.
De este modo, intentarán también comercializar “piñas en rodajas, segmentos, jugos y concentrados”.
El país intenta a toda costa diversificar las exportaciones en medio de una economía nacional deprimida que no puede cubrir ni siquiera las necesidades básicas de alimentación de sus ciudadanos.
Pese a esto, la burocracia y el control estatal sobre el renglón de las exportaciones impide una producción más dinámica en el sector. Solo cinco empresas nacionales tienen permiso para exportar, reveló al medio citado Escalante Pérez.
Esto implica que hasta Ceballos en Ciego de Ávila tengan que llegar los mangos desde Camagüey o Trinidad, y carbón desde Granma, por ejemplo.
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