El gobierno cubano aseguró que en el mes de noviembre se resolvería la actual carencia de puré de tomate en las tiendas recaudadoras de divisas. Hasta la fecha el producto, en Santiago de Cuba, a duras penas se encuentra en los centros estatales.
El puré de tomate se comercializa en el mercado negro o informal
Hasta tres CUC se llega a vender una caja de 500 ml con puré de tomate, un producto que es vital en la cocina del cubano ya que se emplea en casi todos los platos. Tiene una alta demanda en la población y su ausencia trastoca la cotidianidad.
Ramona, vecina de Santa Bárbara, cuenta que llegó un día a una de las tiendas del barrio y presenció una escena:
“Una mujer entró y le hizo una seña a la vendedora. Esta sacó un paquete envuelto en papel periódico. Luego a par de cuadras estaba la señora vendiendo a 50 pesos las cajas con puré de tomate. Le pregunté, porque me puse para la maldad, y me dijo que una amiga se las había guardado que habían sacado en una tienda, bien lejos de donde estábamos”.
Ramona cuenta que volvió a la tienda, le preguntó a la dependienta si habían sacado puré de tomate y esta le dijo que no. Entonces decidió encararla y ante la amenaza, la trabajadora estatal no tuvo más remedio que venderle par de cajas.
“Las tenían guardadas y por la complicidad de las demás, me di cuenta de que es un negocio de todas al mismo tiempo”.
Esta santiaguera, ya entrada en años, sabe que ante la carencia de un producto en las tiendas recaudadoras de divisas se dispara el acaparamiento y la especulación. Se pregunta qué sucede con aquellos que tiene que velar por la transparencia de la venta de lo poco que hay.
"¿Hay alguien encargado de constatar que el puré de tomate esté en mostrador?"
Otro santiaguero que prefiere mantener el anonimato, asegura que su esposa trabaja en una de estas tiendas recaudadoras de divisas, específicamente en la parte del mercado de productos alimenticios.
"Siempre está al tanto de aquello que falta en las demás entidades de su empresa TRD y a las rebajas y tiene a su gente a quien avisarle para revender en la calle".
El esposo es una de estas personas. Desde que la crisis con el puré de tomate comenzó, no ha dejado de vender estas cajas de forma informal.
“Vendo al menos cuatro al día, a dos o tres CUC. Saca cuenta si gano aproximadamente 90 centavos en una, por cuatro, mínimo gano tres y pico de CUC por día. Te repito, mínimo”.
Añade que para que este tipo de “negocio” funcione todo el mundo tiene que ponerse de acuerdo, hablar el mismo idioma, desde el almacenero hasta los dependientes.
“En ocasiones, cuando la cosa se pone peor, lo que hacen en la tienda de mi mujer es que sacan un poco para aparentar, o si le avisan que alguien va a ir a verificar y así parece que sí se vende y como hay tanta falta, pues nadie sabe si es que hubo poco, etc.,” comenta.
Ahora es el puré de tomate, antes faltaba el aceite, el detergente, también pasó con los jabones y los desodorantes. Siempre hay algo falta en las tiendas y que lacera, grandemente, la tranquilidad de las personas, un filón que muchos saben aprovechar para sacarle tajada.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: