Cubanos entrevistados por el programa "Hacemos Cuba", del Canal Caribe, se mostraron partidarios de los reportajes sobre operativos policiales de confiscación de alimentos y delitos de acaparamiento, habituales en la televisión cubana en las últimas semanas.
El coronel de la PNR que concurrió como entrevistado principal del espacio televisivo indicó que "los cubanos están respondiendo al llamado”, y precisó que en muchos casos es la propia población la que avisa a la policía de presuntos hechos delictivos, que luego acaban siendo confirmados en la mayor parte de los casos.
“Deben tener mano dura y sin piedad porque los niños, los ancianos y los trabajadores estamos recibiendo el látigo de la ambición de esas personas”, indicó una de las entrevistadas.
En lo relativo a la pertinencia de que aparezcan en pantalla los rostros y los nombres de los infractores, algunos son partidarios de que salgan a cara descubierta pero sin nombres.
Otros más radicales sí abogan por que sean desenmascarados completamente y con carácter ejemplarizante. “No son momentos para cometer ese tipo de infracciones”, sentenció uno de los entrevistados.
Una joven afirma que lo deseable sería que el rigor policial con los delitos económicos se extendiera más allá de la actual circunstancia de enfrentamiento al coronavirus.
Entre las recomendaciones sugieren que se profundice más en lo relativo a cómo y dónde compran los artículos, pues recuerda que “alguien arriba de ellos les da la posibilidad de acceder a esos productos".
Otro joven pide que se atienda al hecho de que “muchos productos también se están quedando dentro de las tiendas”, y pide mayor atención sobre ese apartado.
No ha faltado quien, sutilmente, recuerde que también hay que centrar la mirada en “las colas”, devenidas en una angustiosa ramificación de la pandemia de coronavirus en Cuba.
Lo cierto es que desde que comenzó la crisis del coronavirus, el gobierno cubano ha extremado el control policial y abundan los reportajes que abarcan un amplio abanico de productos y delitos.
Aunque la mayor parte de los casos denunciados y televisados están relacionados actividades económicas ilícitas vinculadas a alimentos, también se han dado otros de robo de pienso para animales, pinturas, petróleo e, incluso, de balones de oxígeno.
Tal es la popularidad alcanzada por los citados reportajes que comienzan a ser conocidos como los “Tras la huella del Noticiero”, en alusión a la popular serie de ficción cubana, también de carácter policial.
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