El gobernador de Florida, Ron DeSantis, solicitó este viernes a la Casa Blanca autorizar la reactivación de la industria de cruceros, para impulsar la economía local afectada por la pandemia del coronavirus.
Las líneas de cruceros, una de las mayores proveedoras de turistas al estado del Sol, dejaron de funcionar al inicio de la pandemia, en marzo del pasado año, y ahora se requiere de su actividad para provocar un "efecto dominó" en el sector turístico, afirmó el político, según un reporte de Telemundo 51.
"En Florida tenemos todo en marcha excepto las líneas de cruceros porque el Gobierno federal no permitirá que (...) naveguen (...) Necesitamos que las líneas de cruceros vuelvan a operar", dijo DeSantis en Puerto Cañaveral, en el sureste del estado.
El gobernador afirma que la economía estatal está presionada por la extensión hasta el 1 de noviembre de una orden de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), que prohíbe a los cruceros embarcar y desembarcar pasajeros en todo el país.
Los CDC determinaron que los operadores de cruceros "no comenzarán ni continuarán operaciones, excepto si lo aprueba la USCG (Guardia Costera estadounidense), en consulta con el personal de HHS/CDC, hasta nuevo aviso", lo que para DeSantis constituye una estocada a la actividad turística y a decenas de trabajadores de la industria en Florida.
El riesgo de contraer COVID-19 en cruceros es "muy alto", alertaron las autoridades sanitarias de Estados Unidos en noviembre pasado. Asimismo, recomendaron que "todas" las personas eviten viajar en cruceros "en todo el mundo", dijeron los CDC.
"Los empleos son muy, muy importantes. Y no son solo para las personas que trabajan en los cruceros. Esto tiene un efecto dominó en todo tipo de pequeñas empresas, operaciones familiares, que prestan servicios a la industria de cruceros", explicó DeSantis al respecto.
La fiscal general del Estado, Ashley Moody, dijo que las compañías de cruceros y las actividades que se desprenden de esa industria registraron pérdidas económicas entre marzo y septiembre de 2020 de casi $77 000 millones de dólares en el mundo.
"La administración de Biden mantiene nuestros cruceros atracados, mientras que muchos otros países importantes comienzan a operar cruceros de manera segura bajo pautas de salud", consideró.
Moody afirma que la justificación para mantener cerrados los cruceros estadounidenses se basa en datos obsoletos y pautas implementadas antes de que existiera una vacuna contra el Covid-19.
La alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Cava Levine, ha dicho que los cruceros generan unos $7,000 millones anuales a la economía del condado, y que de ellos dependen 40 000 empleos.
Asimismo, que los cruceros mantienen vivos otros sectores de la economía condal, pues son proveedores de turistas para otros negocios locales.
Algunas líneas de cruceros como Royal Caribbean, que tiene su sede en Miami, han dicho que reanudarán sus viajes desde los puertos de otros países como Bahamas y Bermudas el próximo 1 de junio.
Asimismo, que implementarán medidas restrictivas como la admisión de pasajeros mayores de 18 años que ya se hayan vacunado.
Para aquellos viajeros que hubiesen reservado un crucero en abril, la compañía prevé tres opciones de gestionar la cancelación de sus reservas: recibir un crédito por el 125% del valor de los pasajes con la condición de reservar un crucero a partir de mayo de 2022, cambiar la fecha, o recibir el reembolso del total pagado.
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