Sahari Pérez Montero es una inspectora de Planificación Física de Las Tunas que se ha convertido en el terror de ciudad. En un vídeo al que ha tenido acceso CiberCuba se le escucha defender su trabajo, mientras sanciona a Yaisbel Cruz Pérez, una madre soltera con dos niños a su cargo.
"No estoy aquí por una religión. Yo estoy aquí por una acción constructiva", asegura la inspectora Pérez Montero al pastor Yoel Demetrio, de la Iglesia Misionera en Cuba, mientras rellena el formulario de la multa de 1,500 pesos impuesta como castigo por una construcción irregular.
En otra ocasión, añade Demetrio, fue multada por la sustitución de una cerca que era de madera por una de ladrillos,
La inspectora Pérez Montero considera que esta madre soltera tiene que darle las gracias porque no le echa abajo la edificación sino que sólo la está multando. De ahí su labor "constructiva. ¿Por qué? Porque no demuelen. Eso es lo mío", recalca.
"Después que terminen esta mezcla, no pueden hacer más", advierte la inspectora a la madre multada. A lo que sus víctimas le responden que si ya los ha multado qué más da, ellos seguirán construyendo hasta que tenga un lugar donde vivir con sus hijos.
"No ésta, las que le dé la gana puede poner", añade la víctima de la inspectora Pérez Montero.
Ésta es la tercera sanción de entre 1.000 y 2.000 pesos que Sahari Pérez Montero pone a esta vecina de Las Tunas, pese a las súplicas del pastor Demetrio para que la sanciones por importes más bajitos para que puedan pagar la multa. "¿De dónde vana. sacar el dinero para pagarla?", se pregunta el representante de la Iglesia Misionera en Cuba.
También ha sido bombardeado a multas al pastor Alain Santiesteban Escalante. Según Yoel Demetrio, ha recibido cinco sanciones en dos meses por importes superiores a los 3.000 pesos. Lo acusan de presunta alteración del orden público y de supuestas construcciones ilegales, pero Demetrio sospecha que esto es una guerra sin cuartel contra la libertad religiosa en Cuba.
El pastor Alain Santiesteban ha tenido que vender su celular para poder abonar las multas y evitar de esta forma ingresar en prisión.
Mientras ellos multan a los pastores en su labor de ayudar a los pobres, "las colas del hambre son de miles de personas", añade Yoel Demetrio que aclara que él no es opositor ni pertenece a ningún partido político. Sólo se dedica a ayudar a los pobres y a denunciar injusticias.
En declaraciones a CiberCuba, Demetrio denunció la difícil situación financiera de la Iglesia Misionera en Cuba que entre abril y mayo ya ha pagado 9.000 pesos en multas impuestas a personas cristianas, en situación vulnerable. Además, la institución da de comer a medio centenar de vecinos, de los cuales 30 son no creyentes.
Por montar un comedor social, Yoel Demetrio recibió una de las cuatro actas de advertencia que acumula en su expediente de pastor contestario y defensor de los pobres en Las Tunas.
La campaña de multas a construcciones supuestamente ilegales recorre un país en crisis permanente de la vivienda. De hecho, al cierre de 2016 el Gobierno reconocía un déficit de 880.000 casas y admitía que los trámites urbanísticos son engorrosos.
Así, por ejemplo, en junio de 2020 se habían impuesto 461 sanciones en Matanzas. Por su parte, en febrero de 2021 habían sido sancionadas casi un millar de supuestas irregularidades urbanísticas en La Habana. Especialmente en los municipios de Guanabacoa, Habana del Este y Cerro.
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