La televisión cubana estrenó el lunes el documental "Canción de barrio", del realizador Alejandro Ramírez Anderson, censurado desde 2014 y que trata de la gira del cantautor Silvio Rodríguez por algunas de las comunidades más pobres de La Habana.
El material, de aproximadamente 80 minutos de duración, fue trasmitido por Cubavisión en horario nocturno. Contiene imágenes y testimonios no solo de los conciertos, sino de la vida de las personas en barriadas humildes de Alamar, San Miguel del Padrón y otras como El Fanguito, en los límites del Vedado.
“El dolor, el deterioro, la imaginación, la violencia, la resignación, el humor, la desesperanza y la precaria esperanza de aquellos que sobreviven una parte ya demasiado extendida y con frecuencia silenciada en nuestra realidad”, opinó el destacado cineasta cubana Fernando Pérez sobre el audiovisual.
El estreno del documental coincide con semanas en que representantes del Gobierno han estado visitando comunidades pobres, con un matiz de aparente preocupación por sus problemas luego del estallido social del 11J. Entre los barrios visitados, incluso por el gobernante Miguel Díaz-Canel, se encuentran La Güinera y El Fanguito.
“Aleluya y felicidades a sus realizadores”, dijo Silvio Rodríguez tras conocer la decisión de estrenar el documental en televisión, luego de siete años censurado. Varios usuarios reaccionaron con reproches a las autoridades por no trasmitir mucho antes un filme necesario por su condición de “inteligente, desgarrador y humano”.
“Si Alejandro actualizara su película, lamentable y dolorosamente, sería aún más dramática. Los problemas se han acrecentado. Y es indignante porque muchos de los que ahora aplauden el material y los censores del mismo sí sabían del audiovisual y lo que ella muestra”, expresó el fotorreportero Kaloian Santos, recordando que la icónica película “Fresa y chocolate” la trasmitieron por la televisión a 20 años de haberse estrenado.
“La censura, ciertamente, ha hecho viejo este documental porque ya la realidad cubana no es la misma, porque la realidad cubana de tanto ocultarla, ya estalló, porque la realidad en general siempre busca la forma de manifestarse”, opinó el periodista Michel Hernández.
“El arte es libre o no lo es. Creo que esa es una de las principales lecciones de esta obra de Alejandro, que después de siete años, después de sucesos fundamentales, ha logrado que muchos cubanos despierten, finalmente, a su realidad”, concluyó.
Por su lado, Díaz-Canel calificó en Twitter de “dura” la realidad que contaba el documental, al tiempo que llamó a los realizadores de la Isla a narrar la gestión gubernamental en las comunidades. “Necesitaremos recursos, manos a la obra y un nuevo documental que cuente cuánto se está logrando”, dijo.
“En decenas de comunidades desfavorecidas se labora intensamente. Viviendas, calles, parques, consultorios, escuelas, rostros, cambian de fisonomía. Se reparan locales y almas”, aseveró con tono propagandístico.
En 2014, el año del documental, el propio Silvio Rodríguez manifestó su sorpresa por el modo en qué vivían los cubanos en los barrios a los que visitó. “He aprendido que la gente está j......, muy j....., mucho más j..... de lo que pensaba”, dijo el Trovador al portal oficialista Cubadebate, reconociendo entonces que él tenía “una vida mucho más cómoda que la inmensa mayoría de los cubanos”.
Alejandro Ramírez Anderson, director de cine y fotógrafo guatemalteco radicado en Cuba, se graduó de la Facultad de los Medios de Comunicación Audiovisual del Instituto Superior de Arte (ISA). Otro de sus documentales, titulado "deMOLER", se refiere a la vida en comunidades que dependían en gran medida de los centrales azucareros, los cuales fueron derribados por iniciativa de Fidel Castro. Sus audiovisuales han recibido numerosos premios y reconocimientos. En su ficha biográfica de Ecured, no figura actualmente "Canción de barrio".
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