La Habana comenzará a aplicar una tercera dosis de refuerzo del antígeno Abdala, empezando por cuatro municipios y extendiendo progresivamente la campaña de vacunación al resto de la capital cubana.
Guanabacoa, Regla, La Habana del Este y San Miguel del Padrón son los cuatro municipios seleccionados por los cuales las autoridades sanitarias empezarán a aplicar la tercera dosis de Abdala, a partir de este lunes 6 de diciembre.
Las personas que no sean convalecientes de coronavirus y acumulen seis meses de haberse inmunizado con el esquema completo de cualquier vacuna, serán incluidas en la campaña que pretende reforzar la inmunidad adquirida con anteriores dosis de antígenos.
Los municipios escogidos fueron los que iniciaron la campaña de inmunización en el mes de mayo. Según Tribuna de la Habana, las autoridades tienen creadas todas las condiciones para iniciar la campaña, desde los locales para la vacunación hasta los medios de transporte y la cadena de frío para conservar los bulbos en la temperatura adecuada.
En sesión del Grupo Temporal de Trabajo de la capital, la doctora Nilda Roca Menéndez, informó que en la capital el 95.8 % de la población posible a vacunar ya ha recibido la primera dosis. Según la subdirectora general de la Dirección Provincial de Salud, el 89.1 ya completó el esquema de inmunización.
Por su parte, el doctor Emilio Delgado Iznaga, director provincial de Salud, expuso la situación epidemiológica por la que atraviesa la capital, destacando que el miércoles se analizaron 4645 muestras y se confirmaron 15 casos positivos a la COVID-19; uno de ellos importado.
Además, indicó que en las unidades de cuidados intensivos se mantienen ingresados cuatro casos críticos y dos graves. En total, permanecen ingresados 287 pacientes, de ellos 133 en el hogar. Se mantienen activos 63 focos epidemiológicos en la capital, con presencia en todos los municipios.
Según Delgado Iznaga, en noviembre se confirmó un total de 679 casos, lo que significó una disminución de casi 4,000 con respecto a octubre (4,493). Curiosamente, el mes elegido por las autoridades cubanas para abrir sus fronteras al turismo internacional termina así con un promedio diario de 23 positivos a la COVID-19, describiendo una llamativa curva de descenso.
Abdala, uno de los cinco candidatos vacunales desarrollados por Cuba y aplicados bajo autorización de uso de emergencia por las autoridades cubanas, se ha aplicado de manera masiva en la población sin haber recibido el certificado de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
No obstante, las autoridades cubanas se han negado a poner en la isla inmunógenos de otra procedencia. Incluso han reconocido que el gobierno de Estados Unidos intentó donar un millón de dosis de medicamentos, ofrecimiento rechazado por los máximos representantes del régimen.
Con un esquema de vacunación que se completa con tres inyecciones, las autoridades sanitarias de Cuba afirman que Abdala demostró una eficacia de 92,28 por ciento en la prevención de la enfermedad causada por el virus.
Venezuela ha importado en los últimos meses un total de 6 millones 970 mil dosis de la vacuna desarrollada por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB). Según el gobernante Nicolás Maduro, el país recibirá al menos 15 millones de dosis de la cubana Abdala para incorporarlas al plan de vacunación contra el COVID-19. Otros países aliados como Nicaragua, Vietnam e Irán también han importado antígenos de fabricación cubana.
A su vez, el ministro cubano de Relaciones Exteriores, Bruno Rodríguez Parrilla, calificó de discriminación la decisión del gobierno de Estados Unidos de no permitir la entrada a viajeros que no se hayan inmunizado contra el coronavirus con vacunas reconocidas por las autoridades de ese país o la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Observamos con detenimiento los reportes sobre el comportamiento de la nueva variante Ómicron. Ya estamos diseñando vacunas específicas. Si fuera necesario, en poco tiempo la desarrollaremos”, declaró recientemente Eduardo Martínez Díaz, presidente de BioCubaFarma.
La aparición de la nueva variante abre nuevamente interrogantes sobre los antígenos desarrollados por Cuba. Sin embargo, para el científico cubano Daniel García, uno de los responsables de los productos cubanos contra el COVID-19, "lo mas probable [es] que la estrategia de dosis de refuerzo que tiene Cuba permita mantener nuestra inmunidad lo suficientemente alta para aguantar cualquier palo que venga".
"Nosotros tenemos tremendas vacunas, y esto son hechos, no una opinión", afirmó a finales de noviembre el científico, ante la inquietud que provoca la variante Ómicron. “Abrir la sociedad, pero con CONTROL, mucho control, puede haber libertad de movimiento y control a la vez. La buena situación actual de Cuba no tiene por qué ser permanente, hay que mantener el control, miremos a Europa y ocupémonos de no volver a eso”, señaló.
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