Las autoridades de la cárcel de Las Tunas pudieran aplicar castigos adicionales a la presa política y Dama de Blanco Aymara Nieto Muñoz por negarse a participar en actos patrióticos organizados por la dirección del penal.
“La directora, que se llama Marta, la quiere entrar en un Consejo, de esos que hacen ellos dentro de la prisión, para denegarle los beneficios, beneficios que, a esta altura, no los hacen bien”, dijo a Martí Noticias su esposo Ismael Boris Reñí.
El expreso político y opositor cubano señaló que el castigo podía ser impedirle las visitas conyugales y llamadas telefónicas, así como remover la libertad condicional y rebaja de sanción, aunque estas dos últimas opciones son descartadas porque Nieto Muñoz no tiene acceso a ellos.
La opositora cubana se negó a participar en una actividad política que se realizó el 24 de diciembre en una cárcel de hombres, y hay otra programada para este viernes, por tanto, decidieron llevarla a un Consejo Disciplinario, donde se podrían adoptar las medidas.
Aymara Nieto Muñoz cumple desde 2018 una condena de cuatro años de privación de libertar por los presuntos delitos de atentado, daño y desacato, cuando salía de la sede de las Damas de Blanco en La Habana.
Desde entonces sus dos hijas y esposo permanecen apartados de la opositora cubana y la situación empeoró hace dos años cuando la trasladaron a la cárcel de Las Tunas, a más de 600 kilómetros al este de La Habana, algo que piden se revierta por los daños colaterales que provoca.
En noviembre de este año se conoció que la Fiscalía pidió un incremento de 5 años a su condena, presumiblemente por liderar y participar en motín de la cárcel donde se encuentra actualmente, algo que la familia y la acusada niegan.
"Esa petición fiscal es una barbaridad más de la dictadura que desgobierna la isla", dijo su esposo.
Su nombre se incluyó en la campaña Presos Por Qué, que desde septiembre lleva a cabo el Departamento de Estado de Estados Unidos.
"¡Aymara Nieto Muñoz, madre de dos hijos, detenida por solo pensar en protestar! En lugar de permitir la disidencia pacífica, el Gobierno de Cuba silencia a sus ciudadanos en prisión", escribió Brian A. Nichols, subsecretario de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, en su perfil de Twitter.
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