Los trámites para acceder a la jubilación en la provincia de Las Tunas presentan una considerable demora de varios meses debido a que durante la primera mitad de 2021, las oficinas del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS) permanecieron cerradas a causa de la pandemia de COVID-19.
Según informaciones ofrecidas al Periódico 26, órgano provincial de Las Tunas, a inicios de 2022 más de mil personas se presentaron para solicitar su retiro laboral y beneficiarse del incremento salarial y las nuevas medidas que estipulan que el año de referencia primigenia sería el último en que la persona laboró.
La paralización de los trámites para el retiro laboral el año pasado a causa los recortes de servicios, se señala como la causa fundamental de que actualmente jubilarse en #LasTunas y como en el resto del país sea un verdadero problema, pero...https://t.co/buyO1dx0b4 pic.twitter.com/9pqwXFlouv— Periódico26 (@26deLasTunas) January 20, 2022
Luis Estrada, funcionario de la Dirección Provincial del MTSS, explicó que parte del problema tiene que ver con la poca cantidad de expedientes que aprueba el Instituto Nacional de Seguridad Social (Inass). Agregó que el sector más afectado es el de Educación y que en el municipio de Las Tunas, apenas otorgaron entre tres y cinco turnos mensuales para el trámite, mientras que el número de solicitantes asciende a más de 500.
Estrada señaló que en la localidad de Puerto Padre apelaron a otros organismos que no presentaron solicitudes y cedieron sus lugares a Educación, pero la medida no fue suficiente. “No hay manera posible de que, a ese ritmo, se puedan ir todos a sus casas ni siquiera en lo que queda de año”, expresó.
Madeline Escriba Santisteban, directora provincial del INASS, reconoció que los atrasos se acumularon durante todo el año anterior y que es alta la cifra de trabajadores que han pedido su jubilación sin poder recibirla todavía. Asimismo admitió que en lo que va de 2022, se han acumulado 300 expedientes más.
Dentro de las causas del notable retraso, destacó el déficit de fuerza de trabajo que presenta el organismo estatal, con apenas dos tramitadores en algunos municipios y en otros solo uno. También comentó que, como los expedientes por invalidez o edad pueden entregarse en las filiales municipales, se alarga el tiempo de recepción de estos documentos. “Una vez que se recibe solo tenemos 30 días para conceder la pensión”, señaló.
Los principales afectados por la situación burocrática son los ancianos, cuestión que sin dudas agrava el problema, teniendo en cuenta que Cuba es el país con mayores cifras de envejecimiento en América Latina.
Según el director del Centro de Estudios Demográficos de la Universidad de la Habana, Antonio Aja Díaz, la población menor de 60 años disminuye sistemáticamente, mientras crece el número de personas que rebasan las seis décadas, en particular las que están por encima de 70 y 80 años.
“Cuba tiene un alto nivel de envejecimiento de su población y una alta expectativa de vida, pero el envejecimiento no se revierte. Tampoco se enfrenta. El envejecimiento se atiende”, apuntó el experto en un reporte publicado por el Noticiero de la Televisión Cubana.
De acuerdo con Aja Díaz, los factores que influyen en esta proyección de la dinámica demográfica del país son la baja natalidad, la mortalidad y las migraciones. Durante 2021, el 21.3% de la población de la isla alcanzó los 60 años y para el 2030 la proporción se elevará hasta un 30%.
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