Más de 35 vuelos por semana arriban al polo turístico Jardines del Rey, en el norte de Ciego de Ávila, a pesar del incremento de los casos de coronavirus en Cuba y de manera particular en esa provincia, que durante los últimos días ha presentado las mayores cifras de contagios.
Lubia Olivera Espinosa, especialista de la Delegación Provincial del Ministerio de Turismo que atiende el área comercial y el Aeropuerto Internacional Jardines del Rey, dijo a la oficialista Agencia Cubana de Noticias (ACN) que tras el inicio de la actual temporada alta (de noviembre a abril), la cantidad de vuelos que llegaban al archipiélago semanalmente era de 27, pero la cifra creció durante el primer mes de 2022.
Para soportar esta afluencia de turistas, provenientes en su mayoría de Rusia, Canadá y México, el gobierno incrementó las capacidades de alojamiento y, en la actualidad, en Cayo Coco y Cayo Guillermo están funcionando 15 hoteles. Los dos últimos en inaugurarse fueron el Kempinski Cayo Guillermo y el Iberostar Daiquirí, que comenzaron a operar el pasado 3 de enero.
Según el reporte de la ACN, al inicio de la temporada invernal, el grupo militar Gaviota lanzó al mercado los hoteles Iberostar Selection Esmeralda y El Coral Level, en cayo Paredón Grande, ubicado en el este de Jardines del Rey.
La doctora Tatiana Artiles Herrera, jefa de departamento en el laboratorio de biología molecular del Hospital Provincial General Docente Roberto Rodríguez, dijo que para asegurar las operaciones turísticas se realizan hasta 500 pruebas diarias de PCR a los visitantes foráneos, quienes se chequean a la entrada de forma aleatoria, mientras que los viajeros provenientes de Canadá también son examinados antes de regresar a su país, por requerimientos de sus turoperadores.
Sin embargo, la experiencia de los turistas que llegan desde esa nación norteamericana en Jardines del Rey y en otros polos hoteleros de la isla no son satisfactorias. A inicios de 2022, varios de estos visitantes denunciaron a medios de comunicación de sus lugares de origen las pésimas condiciones del centro de aislamiento al que fueron trasladados tras confirmarse que se contagiaron de coronavirus durante su estancia.
Laurianne Gagné, de 22 años, contrajo la enfermedad mientras se hospedaba en el hotel Memories Caribe Beach Resort, de Cayo Coco, y tras dar positivo un día antes de su regreso a Quebec, fue trasladada al Playa Paraíso, instalación destinada por las autoridades para esos casos.
Según su experiencia, en la habitación donde la ubicaron junto a otras personas en su misma situación, no tenían seguridad y tuvieron que conformarse con poner una silla frente a la puerta para detectar a posibles intrusos. Contó que en el alojamiento no les ofrecieron jabón ni papel higiénico y que lo tuvieron que exigir durante dos días, mientras que las camas solo tenían una sábana y las lagartijas deambulaban por todo el local.
Guylaine Pellerin, de 21 años, también aseguró que no tenían un horario estable para la comida y que la calidad de los alimentos era dudosa. Añadió que tampoco les garantizaron conexión a Internet para comunicarse con sus familias y que había basura por todas partes.
En Varadero, Jillian White, residente en la ciudad de Halifax, en la provincia de Nueva Escocia, y que había visitado Cuba en una docena de ocasiones anteriores, relató al periódico local Global News la amarga experiencia en su último viaje y aseguró, con pesar, que nunca más regresaría a la isla. White explicó que además de perder su vuelo a Canadá y tener que pagar uno nuevo, más caro, también fue obligada a cubrir los gastos de su estancia en el centro de aislamiento donde las condiciones de alojamiento dejaban mucho que desear.
A pesar de la fachada que las autoridades cubanas se esfuerzan por vender al mundo de turismo seguro en el país, al menos durante 2021, el flujo de visitantes internacionales cayó un 67%, reforzando la tendencia decreciente del sector en los últimos tres años.
Datos publicados por la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI) reflejaron que, al cierre de diciembre, a Cuba solo llegaron 573,944 viajeros, lo que representa el 39,8% de los turistas recibidos en igual periodo de 2020, es decir, 869,181 extranjeros menos.
El 1 de febrero, la Empresa Cubana de Aeropuertos y Servicios Aeroportuarios S.A. (ECASA) anunció en su canal de Telegram los vuelos programados a Cuba para este mes provenientes desde Estados Unidos, Nicaragua, España y otros países, entre ellos varios de los principales emisores de turismo como es el caso de Canadá, desde donde deben arribar aproximadamente ocho viajes por semana.
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