El gobernante cubano Miguel Díaz-Canel felicitó este jueves a la Fiscalía General de la República por sostener el Estado socialista de derecho, en medio de altas peticiones fiscales y condenas de hasta 30 años a manifestantes del 11J.
En una reunión en la que la institución estatal pasó revista a su trabajo durante 2021, el mandatario reconoció a los trabajadores y directivos de la Fiscalía “por la manera en que se crecieron el pasado año”, según un reporte del periódico oficialista Granma.
Un tuit de felicitación publicado por el gobernante recibió varias respuestas que revelan la percepción del cubano sobre el trabajo de este órgano estatal, plegado siempre a los intereses del poder y sus representantes.
“¿Esa es la misma FGR que dice que no es ilegal protestar en Cuba y luego condena a los cubanos a 20 años de prisión por protestar pacíficamente?”, preguntó un usuario.
El internauta se refería así a los amañados juicios contra 790 manifestantes del 11J -según datos oficiales-, los cuales han generado gran malestar en la población a partir de la severidad de las peticiones fiscales de condenas y de las violaciones al debido proceso que han denunciado familiares de los presos políticos, activistas y organizaciones por los derechos humanos.
Díaz-Canel afirmó en el encuentro de la FGR que las protestas antigubernamentales fueron provocadas desde Estados Unidos, “dirigidas a fracturar la unidad en torno a la Revolución, a socavar la confianza de la población, como parte de una guerra no convencional, y a aplicar el llamado «golpe suave», y todo ello aprovechando las condiciones impuestas por la COVID-19”.
El dirigente castrista afirmó que los trabajadores de la Fiscalía habían madurado en medio de esas circunstancias, con el propósito de respaldar al régimen, y aplicar en 2022, las ideas y conceptos emanados del octavo Congreso del Partido Comunista de Cuba.
Reiteró en varias oportunidades la importancia de que la institución judicial sea creativa en sus funciones y dijo que mensualmente se propiciarán encuentros entre la dirección del país y las instituciones vinculadas al cumplimiento de la ley.
Esta iniciativa responde a declaraciones del gobernante de que en Cuba no existe separación de poderes, sino una “unidad” de estos, lo cual entra en contradicción con todos los fundamentos de las sociedades democráticas modernas.
"En el mundo se habla mucho de la división de poderes. El poder legislativo está generalmente en las instituciones que aprueban leyes, el poder ejecutivo en el gobierno y el poder judicial en los tribunales, pero en Cuba no se trabaja con la división de poderes. Se trabaja con la unidad de poderes, a través de órganos que tienen funciones diferentes", dijo Díaz-Canel en un encuentro con los presidentes de las Asambleas Municipales del Poder Popular, en septiembre de 2021.
Su actual reunión con la Fiscalía corresponde a un proceso de rendición de cuentas que este órgano y el Tribunal Supremo Popular realizan ante la Asamblea Nacional, en un momento en que en el país se ha encendido la polémica en torno a los anteproyectos del Código de las Familias, que se somete a consulta ciudadana este mes, y el Código Penal, que podría aumentar aún más la restricción de libertades y la represión por parte de las autoridades. Esta última legislación será aprobada sin escuchar las consideraciones y opiniones de la sociedad civil cubana.
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