Las demoras de la Empresa Eléctrica en Ciego de Ávila para indemnizar a los clientes por daños a la propiedad se incrementaron considerablemente durante el último año.
Un texto publicado en el periódico oficialista Invasor revela que en 2020 el tiempo de solución a los daños a la propiedad, ya sea por indemnización, reparación o reposición, se comportó en un rango promedio de 32 días; sin embargo, el pasado año ese tiempo de espera se elevó hasta los 55 días.
Según los datos ofrecidos a ese semanario por el Centro Integral de Atención al Cliente (CIAC) de la Empresa Eléctrica del territorio avileño, durante 2021 se contabilizaron “un total de 121 daños a la propiedad con 194 expedientes y 574 equipos (de ellos, casi el 47 por ciento corresponden a alumbrado), equivalente a un índice de 3.3 por cada 1,000 clientes”.
En algunos casos, como el de la avileña Misdalys López Marrero, la respuesta de la Empresa Eléctrica a su reclamación llegó, pero la solución que le dieron no fue la mejor para ella. El dinero que le entregaron por el “valor” de su refrigerador dañado no alcanza para comprarse otro.
“En aquel entonces no había refrigeradores para reponer, tampoco existía la posibilidad de repararlo en ningún taller y entonces recibió, en conformidad, los 12,125.00 pesos que le entregaron por el perjuicio ocasionado”, explicó Invasor.
“Acepté el dinero porque si lo rechazo me quedo sin nada”, señaló López Marrero, pero añadió que “cambiar esa cantidad de moneda nacional a MLC (moneda libremente convertible) era y es insuficiente, ahora más con el precio de la calle, para comprarme uno nuevo en las tiendas en divisas”.
Su vecino no corrió con igual “suerte”, pues no tuvo derecho a la indemnización de la Empresa Eléctrica porque su dispositivo había sido reparado con anterioridad.
Las regulaciones para la atención a este tipo de reclamaciones estipulan que la empresa no dará ningún tipo de indemnización cuando “se dañen refrigeradores cuyas máquinas hayan sido reparadas y no tengan garantía de talleres estatales (siempre y cuando sea el único equipo dañado)”, algo que elude por completo la responsabilidad de la Empresa Eléctrica por el daño ocasionado, independientemente que se trate de un equipo reparado con anterioridad.
Los daños a la propiedad ocasionados por irregularidades en el servicio eléctrico son frecuentes. Entre las principales causas que resultan válidas para un proceso de reclamación están “las afectaciones del servicio eléctrico reportadas a la Empresa Eléctrica, y las debidas a operaciones de apertura y cierre del circuito sin que medie en ellas un tiempo mayor de tres minutos; falso contacto del 'neutro' de la red, así como desgaste y falta de mantenimiento de los materiales y equipos de las instalaciones de distribución”, señaló Invasor.
Sin embargo, el reporte del medio de prensa justifica que el desgaste y la falta de mantenimiento se deben a la “tensa situación financiera” que vive el país desde hace varios años y al “recrudecimiento del bloqueo yanqui”.
El texto asegura que ambas razones han afectado, por un lado, el normal desempeño de las principales unidades de generación en el país, y por otro, la adquisición de elementos imprescindibles para garantizar la seguridad y calidad del servicio que presta la Empresa Eléctrica.
El problema medular no son las causas que llevan a los daños a la propiedad, las mismas que se enuncian desde años, sino el hecho de que los avileños, y los cubanos en sentido general, pagan por un servicio eléctrico que actualmente presenta no pocas deficiencias, incluidos los reiterados apagones que ya son costumbre en todo el país, las constantes fallas del Sistema Electroenergético Nacional y los costos nada asequibles de la electricidad.
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