Las autoridades sanitarias de Sancti Spíritus decidieron realizar acciones de reparación y mantenimiento en los hospitales Camilo Cienfuegos, del municipio cabecera, y Tomás Carrera, de Trinidad, tras varios años de abandono y deterioro.
Según el periódico oficialista Escambray, en total destinaron cerca de 70 millones de pesos para las inversiones que, incluyen la ampliación de su capacidad y el perfeccionamiento de algunos servicios especializados como la Sala de Neonatología en el Hospital Provincial, que, hasta el momento carece de acceso directo al agua.
Rolando Martínez Arrechea, al frente del Departamento de Inversiones de la Dirección Provincial de Salud, especificó que para las labores de construcción y montaje cuentan con 22 millones de pesos, los cuales deben cubrir la edificación de una cocina en el Camilo Cienfuegos y la colocación de un falso techo en toda la institución, que tampoco cuenta con las neveras necesarias para la conservación de alimentos, ni con las redes de vapor o gas.
El funcionario explicó que esperan acometer también el levantamiento de una sala de “atención al paciente grave, unidad que supone una ampliación de las capacidades existentes al habilitar 56 camas que se distribuirán en una docena de cubículos para Cuidados Intermedios e Intensivos”.
Afirmó que el nuevo espacio contará con estándares de calidad propios del “primer mundo, con enchapes hasta el techo, carpintería de aluminio lacrado y mayor número de posiciones para la atención a los enfermos” y comentó que ya repararon los siete salones quirúrgicos del centro, así como los salones de parto y cesárea, que no tenían disponibilidad de agua las 24 horas.
El presupuesto destinado al hospital de Trinidad es mucho menor, pues solo incluye siete millones de pesos. Con esa suma esperan construir una sala de Hemodiálisis que beneficiaría a los pacientes de ese municipio que, hasta la fecha, se ven obligados a ir tres veces a la semana a la cabecera provincial, y cubrir una distancia de casi 70 kilómetros.
“Allí se acomete la fundición de 300 metros cuadrados de cubierta, al unísono con otros objetos de obra, entre ellos la sala de Medicina y se trabaja en la farmacia interna del centro, así como en las unidades de Citología, Anatomía Patológica y la Morgue”, indicó también el medio local.
Además de los dos hospitales, la Dirección Provincial de Salud de Sancti Spíritus aseguró la reparación de más de 40 consultorios médicos, fundamentalmente los ubicados en barrios y comunidades vulnerables. No obstante, las autoridades no ofrecieron detalles sobre el tiempo de culminación de ninguna de estas obras.
Las promesas de reconstrucción y mantenimiento llegan en un complicado momento para el sistema de salud nacional. En la misma provincia central, la afluencia de pacientes con sospechas de dengue ha aumentado hasta el medio centenar diario, lo cual ha obligado a que los directivos de los centros asistenciales reajusten la estructura de los edificios para atender a los enfermos.
Para el 21 de julio pasado el número de personas con síntomas febriles inespecíficos, ascendía a 1,200, en tanto el índice de infestación del mosquito aedes aegypti era del 0.70 y el índice de Breteau —que indica la dispersión del vector— se halla por encima del 1.00. El municipio cabecera, Trinidad, Jatibonico, Tabasco y Cabaiguán aparecían como las localidades con mayores complicaciones.
La situación en este último municipio se agravó también durante junio pasado como consecuencia de los apagones. Una enfermera denunció que en el hospital local los pacientes estaban en peligro porque con frecuencia se afectaba el servicio eléctrico.
La profesional, identificada como Yasnalla Mederos, contó que los trabajadores del centro habían informado reiteradamente que el grupo electrógeno estaba roto y que como consecuencia, durante una madrugada se vieron obligados a atender con las luces de sus celulares a un paciente grave que, lamentablemente, falleció.
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