Bill Russell, leyenda de los Celtics de Boston y jugador más laureado en la historia de la NBA, falleció este domingo a los 88 años.
La noticia fue dada a conocer por su familia en un comunicado difundido en la cuenta de Twitter de Russell, donde no se especificaron las causas de su muerte y se precisó que estuvo acompañado por su esposa al momento del deceso.
Russell, quien fue también un destacado activista del movimiento por los derechos civiles, obtuvo 11 títulos de la NBA, más que cualquier otro jugador, y cinco premios al Jugador Más Valioso, durante una carrera de 13 años siempre con los Boston Celtics.
“Fue el más grande campeón de todos los deportes en equipo”, dijo al conocer la noticia Adam Silver, el comisionado de la NBA, en un comunicado.
“Bill luchaba por algo más grande que el deporte: los valores de la igualdad, el respeto e inclusión, que se han estampado en el ADN de nuestra liga”, agregó el comisionado, haciendo alusión al activismo de Russell.
En 1963, en medio de las tensiones raciales en EE.UU., Russell abrió el primer campamento integrado de baloncesto para blancos y negros.
Miembros del Ku Klux Klan vigilaban los entrenamientos dirigidos por la estrella de la NBA, mientras era protegido por un grupo de activistas negros.
“En la cúspide de su carrera deportiva, Bill defendió enérgicamente los derechos civiles y la justicia social, un legado que transmitió a las generaciones de jugadores de la NBA que siguieron sus pasos”, concluyó Silver.
El expresidente Barack Obama, quien entregó a Russell la Medalla de la Libertad en 2010, lo calificó como “un gigante”, poco después de conocer la noticia.
“Tan alto como era Bill Russell, su legado se eleva mucho más, tanto como jugador como persona”, consideró Obama en un tuit.
De 2,08 metros de altura, Russell jugaba en la posición de pívot y fue uno de los mejores reboteadores y taponadores de la historia de la NBA.
Es, junto a Wilt Chamberlain, su gran rival de la época, el único jugador con más de 50 rebotes en un partido.
Su rivalidad con Chamberlain, uno de los grandes jugadores ofensivos de la historia, contribuyó a la popularización del baloncesto en Estados Unidos.
Michael Jordan, considerado el más grande baloncestista de todos los tiempos, dijo sentirse consternado por la muerte de Russell, en un comunicado difundido en la cuenta de Twitter de los Charlotte Hornets.
“Bill Russell fue un pionero -como jugador, como campeón, como el primer entrenador negro de la NBA y como activista. Marcó el camino e impuso el ejemplo para cada jugador negro que llegó a la liga tras él, incluyéndome a mí. El mundo ha perdido una leyenda. Mis condolencias a su familia y que en paz descanse”, declaró Jordan.
Russell ganó con la Universidad de San Francisco los campeonatos de la NCAA en 1955 y 1956, así como con la selección estadounidense la medalla olímpica de oro en los Juegos de Melbourne 1956.
Dos de sus títulos de NBA, los obtuvo como jugador-entrenador, convirtiéndose así en el primer entrenador afroamericano en dirigir un equipo de la liga.
Apodado The Hawk (El Halcón), fue reconocido por primera vez en el Salón de la Fama del Baloncesto como jugador en 1975, y luego de nuevo como entrenador en 2021, y su camiseta con el número 6 fue retirada por los Celtics.
Su legado para la NBA es tan significativo que el Premio al Jugador Más Valioso de las Finales NBA lleva su nombre desde 2009.
En 2020, una estatua suya fue emplazada en la Plaza del Ayuntamiento de Boston.
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