El primer ministro de Cuba, Manuel Marrero Cruz, admitió que el país atraviesa una compleja situación económica y afirmó que entre todos hay que hacer cosas diferentes para salir de la crisis.
"Desde el gobierno tenemos que hacer cosas diferentes. Hay que organizar un gobierno en la calle", expresó en el balance anual del Ministerio de Economía y Planificación.
En la reunión, Marrero señaló que hay una claridad total de los problemas, pero que el tema pendiente es "cómo salir de esta situación", porque todo lleva un nivel de divisa.
"¿Cómo ingresamos más divisa? Este asunto requiere ponerle pensamiento", afirmó, citado por Cubadebate.
Afirmó que no se ha podido superar la crisis económica desatada por la pandemia, a lo cual se suma el conflicto armado en Europa, que afecta al comercio mundial.
"El 2023 va a ser un año diferente, pero para que lo sea hay que hacer cosas distintas. No basta la consagración y el refuerzo si no viene acompañado por resultados. Tenemos autobloqueo, hay que hacerle una guerra abierta contra las ineficiencias y las chapucerías", enfatizó.
Según el dirigente, a los problemas acumulados de años anteriores se suma el impacto del bloqueo de Estados Unidos.
"Hay que lograr inversiones y eso hay que hacerlo con crédito, pero sin eso es muy difícil. La inclusión de Cuba en la lista de patrocinadores del terrorismo es una de las que más daño nos hace porque nos cierra las puertas del sistema financiero internacional", recalcó.
El primer ministro también habló del programa de estabilización macroeconómica como "la clave" de todos los problemas.
"Hay que revisar los mecanismos para la asignación de divisas. Mientras sigamos manteniendo los actuales esquemas no vamos a lograr que la empresa estatal sea el principal actor económico. Vemos precios abusivos y la inflación. Decimos que para que haya más ofertas hace falta divisas y volvemos al mismo círculo", concluyó.
La semana pasada, el primer ministro pidió dejar a un lado la burocracia y las "reuniones que no dan nada", durante un encuentro con habitantes de Gibara, en Holguín.
"Nosotros estamos pidiendo que en el sistema de trabajo del gobierno dejar a un lado tanta burocracia, tantas reuniones que no dan nada. Y que se baje más a la base, se contacte más con el pueblo", aseguró.
En la visita, que formó parte de los encuentros de los dirigentes cubanos con la población a manera de campaña propagandística de las elecciones generales del 26 de marzo, Marrero se refirió a la escasez de alimentos y a la búsqueda de soluciones.
"Hay un pueblo que pide que realmente resolvamos estos problemas, que salgamos adelante, para ver cómo elevamos la calidad de vida, pero con la revolución. Es un pueblo que está claro que ninguna fórmula extranjera será el futuro de este país", dijo, con su habitual tono triunfalista.
En enero, en una reunión con dirigentes provinciales, llamó a prestar atención a los planteamientos de la población y a "cambiar todo lo que debe ser cambiado", frase que generó indignación entre los internautas.
"Empiecen por ustedes", dijeron varias personas.
En Facebook, un usuario le propuso un cambio a Marrero: "Te cambio mi comida por la tuya, vamos a empezar por ahí".
"Todos los de la cúpula política deben de ser cambiados porque no han sabido echar para adelante el país", dijo otro en Telegram.
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