La revista de moda estadounidense Harper’s Bazaar escogió como artista invitada para su edición de junio/julio a Anitta, a quien considera la estrella pop brasileña más influyente a nivel mundial desde los años 60.
La publicación definió a la cantante como un nuevo tipo de estrella pop cuyo principal atractivo es lograr insertarse en el mercado anglosajón independientemente de la barrera geográfica del idioma. Audaz, feminista y desenfadada, pero sobre todo, mujer segura y empoderada, dispuesta a hablar de todo sin tapujos, son algunos de los calificativos que le dedicó.
“Yo bailo, culo al cielo, y se vende más (...) a la gente le encanta quejarse: 'Oh, esta persona es tan vulgar', pero eso es lo que les gusta. Además de todo, también soy empresaria. Soy un artista. Sé cómo subirme al escenario y hacer que todos salten, hacer que todos hagan lo que yo quiero. Sé que vende”, comentó la brasileña.
La empresaria es consciente de que las personas manipulan la información porque no tienen el coraje de decir lo que realmente quieren sino lo que saben que vende y que queda mejor en boca de otros.
Al respecto, Anitta contó para la revista la simpática anécdota de cuando confesó que para aprender los cinco idiomas que habla contrató a varios coach que la acompañaban en sus giras para ayudarla con la fluidez. La historia real no tuvo la misma repercusión que la otra versión que dio, en la que dijo a los medios que los cinco idiomas los aprendió a hablar saliendo con hombres de lugares remotos que eran sus novios.
Sobre la creación de Anitta, cuyo nombre real es Larissa de Macedo Machado, explicó que es el resultado del deseo y la necesidad de convertirse en una mujer valiente. “Alguien a quien nadie podría dañar, a quien nadie podría hacer llorar, cuyos sentimientos nadie podría herir, que podría encontrar una salida a cualquier situación… así es como creé ese personaje”.
La también actriz, bailarina y presentadora comentó que fue agredida sexualmente por un novio abusivo cuando tenía 14 y 15 años. De esto se habla en un episodio de Anitta: Made in Honório, una de las dos series de Netflix que documentan su vida.
De sexo, las relaciones abiertas, su bisexualidad y religión, también conversó con la revista.
La estrella brasileña abrazó el candomblé, la religión de su padre, a raíz de haberse decepcionado luego de un incidente en la iglesia católica en el que se rechazó la cultura negra y la religión negra. El candomblé, explica la cantante, es muy practicado entre los afrobrasileños y ha sido marginado en el país por involucrar algunos elementos yoruba como los orishas.
“La gente tiene muchos prejuicios”, afirma. “Cuando se trata de las comunidades pobres, la gente lo ve como algo malo. Cuando viene de los negros, cuando viene de los indios, cuando viene de los asiáticos, todas las personas que sufren racismo, creo que esas religiones sufren más”, añadió.
Sobre su experiencia de crecer en una favela la artista explica que en Brasil, el funk carioca es denigrado por sus letras sobre sexo y droga debido a que lo hacen los brasileños negros pobres. También explicó que luego de educarse en temas políticos decidió dar su respaldo en las elecciones de 2022 al presidente electo Lula da Silva y usó su imagen para concientizar a los jóvenes en la necesidad de votar.
Consciente de que han pasado muchas décadas para que una figura brasileña sea reconocida a nivel mundial y la presión que eso supone, Anitta reconoce que ha trabajado muchísimo y que en 2022 se vio obligada a parar por problemas de salud. Fue operada de endometriosis y sufrió un brote del virus Epstein-Barr. “No podía subir al segundo piso de mi casa”, dice. “Estaba tan enferma y vi cuánto no me estaba cuidando. Solo estaba trabajando, trabajando, trabajando, trabajando”, apunta.
Anitta prepara su sexto álbum que tendrá una música más orientada al funk carioca, con el sonido que tenía al inicio de su carrera. En esta ocasión hará un dúo con Sam Smith, el aclamado cantautor británico.
Sobre el resto de sus proyectos la imparable estrella comentó que ha pasado parte del año en Madrid filmando la séptima temporada de Élite y habló de sus empresas comerciales en Brasil donde lleva una bebida alcohólica inspirada en el funk carioca.
La brasileña espera comercializar pronto en los Estados Unidos su colonia íntima llamada Puzzy a la que reconoce haberse vuelto adicta. Según ella permite conservar a las mujeres muy buen olor en sus partes íntimas hasta el final del día.
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