Osvel Pérez Mantilla, uno de los tantos cubanos sobre el que pesa una I-220B en EE.UU, asegura que el juez que le entregó la orden de deportación le dijo que en Cuba no hay una dictadura.
Ahora el migrante, quien ya tiene su vida hecha en territorio estadounidese, teme convertirse en uno más de los cubanos que están siendo retornados a la isla.
“Vine a este país buscando libertad. Presenté mi caso de asilo en Lousiana, dos años detenido, no gané el asilo porque me decían que en Cuba no había una dictadura y automáticamente me dieron una I-220B, que es una orden de deportación”, explicó en declaraciones al periodista Mario J. Pentón para America Tevé.
El cubano teme quedar detenido esta misma semana cuando se presente a una cita que tiene programada con ICE para renovar su permiso de estancia.
Dice que lleva días sin dormir, pensando en lo que podría pasar con su esposa y con la vida que ha hecho en Estados Unidos si lo deportaran a territorio cubano.
“Desde que llegué a este país estoy trabajando, desde que tengo los papeles y me dieron el permiso de trabajo”, asegura Osvel, que como otros muchos cubanos sobre los que pesa una orden de deportación se preguntan por qué algo tan malo les está pasando ellos.
“Esto en lo personal me está afectando mucho, estoy que ni como ni duermo pensando solamente en que si yo hice el bien y voy a seguir haciendo el bien, porque me voy a presentar en la cita de ICE...que me vaya a suceder lo peor, que me vayan a llevar para ese país, para la dictadura, de verdad estoy bien nervioso”, concluyó.
El pasado jueves arribaron un total de 33 cubanos deportados a La Habana en el cuarto vuelo de deportación procedente de Miami en lo que va de año.
El nuevo vuelo deportación tuvo lugar a casi un mes del tercero, pues el pasado 22 de junio el gobierno de Estados Unidos repatrió a un grupo de 36 ciudadanos.
El gobierno de Estados Unidos ha devuelto hasta el momento un total de 258 cubanos desde que se reanudaron los vuelos de ICE a finales de abril.
Los deportados son cubanos que habían perdido sus entrevistas de miedo creíble al entrar al país y habían recibido un documento I-220B (orden de deportación), aunque se mantenían en libertad bajo supervisión.
Las operaciones de deportación se suman a las medidas de emergencia aplicadas por la administración de Joe Biden para controlar el flujo descontrolado de inmigrantes cubanos por la frontera sur de EE.UU. y las costas de Florida.
Las autoridades han incrementado las detenciones de inmigrantes con 1220B cuando comparecen a citas en las oficinas de ICE.
Aunque todas las historias son tristes, hay algunas especialmente conmovedoras, como la del niño de 10 años que arribó a Florida procedente de Cuba a finales del pasado año para reunirse con su papá, con tan mala suerte que el padre del menor fue detenido en junio y deportado la pasada semana.
Otro caso dramático es el de un joven, también deportado ahora este mes, que no pudo conocer a su bebé, nacida a finales de junio.
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