El homeless cubano que denunció haber sufrido una golpiza a manos de dos policías en Hialeah en diciembre pasado, declaró esta semana en el juicio contra uno de ellos.
José Ortega Gutiérrez reiteró el jueves su acusación contra el exoficial Rafael Otaño, quien está acusado de agresión y secuestro.
Ortega Gutiérrez, de 50 años, declaró que el 17 de diciembre ambos exagentes lo esposaron, lo secuestraron y lo llevaron a una zona apartada de Miami-Dade para pegarle.
"Ellos dijeron: vamos a dar una vuelta'. Y la vuelta fue que me llevaron para allá a darme golpes. Allí me dejaron tirado como si estuviera muerto, y se fueron", relató, tal como muestra un video de America TeVe.
Al presenciar el video de su detención, se equivocó varias veces al identificar al policía que lo esposó.
Ante una pregunta del abogado de la defensa, el cubano admitió haber consumido alcohol el día de los hechos, pero negó que su consumo de alcohol afecte su capacidad para observar y recordar acontecimientos. Admitió que tenía problemas de memoria, pero se molestó con el letrado y lo acusó de intentar confundirlo.
"Entiendo que usted trate de defender a sus policías, pero está defendiendo a unos policías que son uno asesinos, porque por poco me matan", le dijo.
Al juicio también acudieron como testigos los dueños de una panadería que ese día por la tarde llamaron a la policía porque Ortega estaba molestando a los clientes, hecho que condujo a su arresto.
Según la mujer, ese día el cubano la acusó de envenenar la comida y de robar las propinas de sus empleados.
La Fiscalía Estatal de Miami-Dade afirma que Rafael Otaño, de 27 años, y Lorenzo Orfila, de 22 años, se llevaron a Ortega Gutiérrez, lo golpearon en un callejón sin salida y lo dejaron allí. Ambos fueron despedidos de la Policía.
De ser hallado culpable, Otaño se enfrenta a una posible sanción de cadena perpetua.
La fecha del juicio contra Orfila, aún no se ha fijado.
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