La presa política Angélica Garrido salió de pase este lunes por primera vez tras más de dos años encarcelada por su participación en las históricas protestas del 11J en Cuba.
“Angélica Garrido, unos días para la casa. Ella está alegre; yo, nervioso. Mucha belleza de golpe, idéntica DIGNIDAD”, dijo en sus redes sociales su esposo, Luis Rodríguez Pérez.
En declaraciones a Martí Noticias, el esposo confirmó que era la primera vez que Angélica salía de pase tras haber sido detenida y sentenciada a tres años de prisión.
“Ahora estamos aquí, muy emocionados, toda la familia abrazándola”, dijo Rodríguez Pérez, quien ha sido sometido a interrogatorio en varias ocasiones por represores de la Seguridad del Estado.
Con anterioridad, el esposo de la presa política explicó al citado medio que esta saldría cinco días de pase tras haber sido trasladada con un régimen de mínima severidad al Centro Penitenciario de Mujeres Ceiba Cuatro, en la provincia Artemisa.
“El régimen de mínima, como también se le conoce, se le había aprobado a Angélica desde el día 3 de julio y se la vienen a dar el día 11; es como un campamento donde las presas de allí salen a trabajar para hospitales en La Habana”, explicó Rodríguez Pérez.
Angélica y su hermana, María Cristina Garrido, fueron recluidas en la prisión de mujeres del Guatao por manifestarse el 11 de julio de 2021 en Quivicán. Los tribunales del régimen las condenaron a 3 y 7 años de prisión respectivamente.
En marzo, ambas denunciaron que las autoridades de la prisión Mujeres de Occidente en La Habana les habían amenazado con suspenderles las visitas familiares.
Según su esposo, las amenazas se produjeron luego de que estas, junto a otras mujeres encarceladas, firmaran una carta con sangre exigiendo al régimen cubano la liberación de los presos políticos.
Antes, en febrero, la presa política envió un mensaje de apoyo y aliento a los encarcelados cubanos por razones políticas.
“Prohibido desanimarse, que Dios está luchando esta batalla por nosotros. El dolor de todos es también nuestro dolor. Nosotras no sufrimos solamente por lo que nos está pasando, sino también por el dolor de otros. Por eso es que estamos aquí, y nos sentimos muy orgullosas, no solo de lo que hicimos, sino de lo que están haciendo ustedes. Gracias por su coraje", expresó Garrido en su mensaje a los presos políticos y a sus familiares.
La joven estuvo entre las prisioneras políticas que a finales de febrero pasado firmaron con su sangre una carta donde reclamaron al gobernante Miguel Díaz-Canel que liberara a los manifestantes pacíficos del 11J.
El régimen cubano acusa a las hermanas Garrido del supuesto delito de atentado, presuntamente por un incidente que ocurrió dentro de un vehículo policíal, luego de que ambas fueran apresadas al día siguiente del histórico estallido.
Ambas fueron arrestadas al día siguiente de las protestas pacíficas. A causa del hostigamiento en prisión, a mediados de 2022 Angélica sufrió una parálisis facial. Un mes después fallecía el padre de las hermanas Garrido sin poder haber visto a sus hijas en libertad.
Tanto María Cristina (42 años) como su hermana Angélica (40 años) son madres de tres y dos niños, respectivamente, que ahora se encuentran al cuidado de familiares.
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