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Policía de Florida acribilla a tiros su propia patrulla tras asustarse con una bellota

El agente creyó oír un disparo, se echó al suelo, sacó su arma y tiró repetidamente contra su auto. Adentro había un joven esposado que por suerte salió ileso.


Un policía de Florida acribilló a tiros su propia patrulla, donde adentro estaba un hombre detenido y esposado, tras asustarse con una bellota que cayó sobre el capó del auto.

El incidente ocurrió en noviembre del año pasado en el condado de Okaloosa, aunque es ahora que han salido a la luz los videos captados por la cámara corporal de los dos agentes implicados.

Jesse Hernández, ayudante del sheriff, y su compañera, la sargento Beth Roberts, arrestaron a un hombre al que se acusaba de robar un auto y enviar mensajes amenazantes a su novia. Ambos lo esposaron y lo metieron en la parte trasera de la patrulla.

Todo marchaba con normalidad hasta que a Hernández le pareció oír un disparo, tras lo cual se tiró al suelo para ponerse a cubierto mientras gritaba repetidamente "¡disparos!". Empezó a rodar, sacó su arma e hizo múltiples tiros a su auto.

Por su parte, Roberts pareció confundida al principio y preguntaba "¿qué?", antes de empezar a disparar también.

Hernández gritó "¡Me han alcanzado!" y agregó que los tiros provenían del interior del carro.

Mientras todo eso sucedía, en el asiento trasero de la patrulla permanecía indefenso y aterrado Marquis Jackson, de 22 años, quien milagrosamente salió ileso de la balacera.

El incidente derivó en una investigación de la Oficina del Sheriff, que concluyó que el uso de la fuerza por parte de Hernández no estuvo justificado. Su pareja fue exonerada porque solo disparó basándose en sus acciones.

Durante la investigación, el oficial se dio cuenta de que lo único que oyó fue una bellota cayendo sobre el capó de su carro.

Hernández renunció a su cargo en diciembre; no obstante, no fue acusado penalmente.

"No tenemos motivos para pensar que el exdiputado Hernández actuó con malicia. Aunque sus acciones en última instancia no estaban justificadas, creemos que sintió que su vida estaba en peligro inmediato y su respuesta se basó en la totalidad de las circunstancias que rodearon este miedo", dijo el sheriff Eric Aden en un comunicado.

Por otra parte, Aden mostró su satisfacción por que Marquis Jackson no hubiera sufrido ninguna herida en el tiroteo.

"Así como tenemos la obligación de proteger a nuestros agentes para que puedan regresar sanos y salvos a casa con sus familias, las autoridades tienen la misma obligación con cualquier ciudadano que esté siendo investigado por un delito", expresó.

Hasta el momento no ha trascendido si Jackson presentará una demanda. No obstante, sí describió lo sucedido en su Facebook y aseguró que está "dañado de por vida".

Captura de Facebook / Marquis K Jackson

"Todo lo que podía hacer era inclinarme y hacerme el muerto para evitar que me dispararan en la cabeza. ¡Estaba muerto de miedo y sabía que lo único en lo que podía confiar era en Dios! ¡Ignoré todo y oré! Las ventanas se rompían todo el tiempo mientras las balas seguían volando a través de mí. Tuve la suerte de no recibir ninguna bala ni lastimarme físicamente, pero mentalmente no estoy bien. No he sido el mismo desde entonces y no creo que este sentimiento que tengo cambie alguna vez. ¡Realmente creo que estoy dañado de por vida!", recalcó.

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