Vídeos relacionados:
Dos provincias cubanas enfrentan una de las peores sequías de los últimos años: Holguín registra un 22 % de déficit de lluvias con todo el territorio clasificado como "muy seco", mientras que Ciego de Ávila acumula 35 meses con precipitaciones bajo la media; y expertos advierten que la situación podría prolongarse.
Holguín presenta un escenario crítico, con solo 52.9 milímetros de lluvias en marzo, lo cual representa el 78 % de su media histórica, indicó el último informe del Centro Meteorológico Provincial, citado por el periódico ¡Ahora!.
Lo más leído hoy:
Antilla, el municipio más pequeño del territorio nororiental, emerge como el más afectado, con un alarmante 83 % de déficit hídrico, y la caída de apenas 10.9 mm de lluvias.
Solo cuatro de los 14 municipios holguineros (Gibara, Calixto García, Cacocum y Urbano Noris) superaron sus promedios habituales.
Según el informe, el 47.7 % de Holguín sufre sequía meteorológica (se produce cuando ocurre un periodo prolongado sin lluvias o con precipitaciones que dejan acumulados por debajo de la media), particularmente en Banes, Sagua de Tánamo y Moa, donde persiste por siete meses consecutivos.
La vegetación y cultivos enfrentan condiciones extremas, con el 100 % del territorio clasificado como "muy seco", excepto pequeñas zonas de Mayarí y Moa, señaló la fuente, que apuntó al impacto negativo en los cultivos y la ganadería.
Ciego de Ávila: Cuatro años de déficit acumulado
La provincia central arrastra una crisis desde 2021: 35 de los últimos 51 meses (69 %) tuvieron lluvias inferiores a los registros históricos.
Además, durante esa etapa, de los 24 meses que están comprendidos dentro del periodo lluvioso (mayo a octubre), en 14 se registraron anomalías negativas de precipitaciones, ilustró el meteorólogo Frank Fernández Castañeda, del Centro Meteorológico Provincial, en un artículo publicado en el diario Escambray. Pese a contar de forma aislada con meses muy húmedos, no bastaron para recargar lo suficiente los acuíferos.
De noviembre de 2024 a marzo de 2025, la provincia acumuló sólo 163.5 mm, con un déficit de 41.1 mm, señaló Fernández. Enero de 2025 fue uno de los más secos en la última década.
Ante la reducción del caudal en las principales fuentes de abastecimiento y la caída en el rendimiento de los equipos de bombeo, las autoridades de Ciego de Ávila impusieron un ciclo de distribución de agua de 24 horas cada nueve días en todos los consejos populares del municipio cabecera, con impactos muy negativos en entidades económicas, sociales y agrícolas.
De acuerdo con Fernández, la sequía es un problema acumulativo: no se trata simplemente de falta temporal de lluvias, sino de un déficit hídrico prolongado que empeora progresivamente.
El análisis del especialista advierte que, cuando las precipitaciones están constantemente por debajo del promedio, los acuíferos y embalses no se recuperan, creando un círculo vicioso: los suelos pierden capacidad de retención, la vegetación se debilita, aumenta la erosión y disminuye aún más la humedad disponible. No basta con lluvias esporádicas, se necesita superar el déficit histórico para revertir la situación.
El Índice de Precipitación Estandarizado (SPI) revela que Ciego de Ávila presenta una sequía meteorológica de ligera a moderada en los últimos tres a nueve meses, mientras que al analizar períodos más extensos (12 a 18 meses) la sequía se intensifica a moderada-severa, e incluso extrema en algunas zonas, al combinarse los efectos meteorológicos e hidrológicos.
Factores climáticos y pronósticos
Expertos atribuyen la escasez de lluvias a la persistente influencia de altas presiones oceánicas que inhiben la formación de nubes y al fenómeno El Niño/Oscilación del Sur (ENOS), que altera los patrones de lluvia desde 2020. Modelos climáticos internacionales prevén que las precipitaciones se mantendrán bajo la media histórica en los próximos meses, agravando la situación.
Meteorólogos señalan que, paradójicamente, solo un ciclón tropical podría aliviar temporalmente el déficit hídrico acumulado, como ocurrió con el devastador huracán Irma en 2017, que puso fin a la sequía más severa que sufrió Cuba (2014-2017) en un siglo.
Preguntas frecuentes sobre la crisis hídrica en Cuba: Holguín y Ciego de Ávila
¿Cuál es la situación actual de la sequía en Holguín y Ciego de Ávila?
Holguín y Ciego de Ávila enfrentan una severa crisis hídrica. Holguín tiene un déficit pluviométrico del 22 %, con el 100 % de su territorio clasificado como "muy seco". Ciego de Ávila ha experimentado 35 meses con lluvias por debajo de la media, llevando a medidas extremas de distribución de agua.
¿Qué medidas se han implementado en Ciego de Ávila para enfrentar la sequía?
En Ciego de Ávila, se ha establecido un ciclo de distribución de agua de 24 horas cada nueve días debido a la disminución del caudal en las principales fuentes hídricas. Esto ha afectado significativamente la vida cotidiana y las actividades económicas en la región.
¿Cómo está afectando la sequía a la agricultura y la ganadería en Holguín?
La sequía ha impactado negativamente en los cultivos y la ganadería en Holguín, donde la vegetación enfrenta condiciones extremas. El déficit hídrico ha debilitado los suelos y la erosión ha aumentado, comprometiendo la producción agrícola y ganadera.
¿Cuál es el pronóstico climático para los próximos meses en Cuba?
Expertos señalan que las precipitaciones se mantendrán por debajo de la media histórica debido a factores como las altas presiones oceánicas y el fenómeno El Niño. Esta situación podría agravar aún más la crisis hídrica en las provincias afectadas.
Archivado en: