El régimen cubano, a través del comentarista oficialista Oliver Zamora Oria, calificó de “grave error” el ataque estadounidense contra instalaciones nucleares en Irán y afirmó que Teherán no tiene otra opción que responder, en un encendido editorial transmitido este domingo por el Noticiero Dominical del Canal Caribe.
“Irán tiene que responder, no le queda otra opción. Mostrar debilidad podría ser su fin en una coyuntura donde se apuesta por la fuerza”, sentenció Zamora desde el estudio, en uno de los posicionamientos más directos del oficialismo cubano sobre el conflicto.
Zamora, corresponsal del canal estatal ruso Russia Today y figura habitual en la propaganda internacionalista del régimen, arremetió con dureza contra la política exterior de Estados Unidos, en especial contra el presidente Donald Trump, al que acusó de haber impulsado una “doctrina simplona” basada en la fuerza.
“Hasta este momento, la política exterior de Trump ha sido la más torpe y fanfarrona de todas las administraciones estadounidenses en las últimas décadas. No ha obtenido ni un solo logro, ni uno solo”, afirmó.
La reacción surge tras los bombardeos ordenados por EE.UU. contra tres instalaciones nucleares iraníes, una acción que Washington calificó de “exitosa”, pero que desde La Habana se presenta como un paso hacia el abismo.

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Apoyo indirecto a una posible escalada iraní
El comentarista justificó la capacidad de respuesta iraní, citando al parlamento de ese país que sugirió el cierre del estratégico Estrecho de Ormuz, por donde circula más de una quinta parte del petróleo marítimo del planeta.
Zamora advirtió que esta medida, aunque extrema, podría disparar el precio del petróleo con consecuencias terribles para todos, pero dejó claro que es una opción sobre la mesa.
Además, subrayó las capacidades militares de los aliados de Irán, como los rebeldes hutíes en Yemen y el grupo libanés Hizbolá, así como la presencia de potencias nucleares en la región que “han marcado una posición firme al lado de Teherán”.
“Irán es una potencia militar que se ha preparado para este momento durante décadas”, aseguró, destacando su industria de misiles y el simbolismo cultural-religioso que alimenta una resistencia profunda. “En una nación donde la vida comienza después de la muerte… perderla por la fe es una recompensa”, apuntó.
Zamora cuestionó abiertamente las declaraciones del secretario de Estado estadounidense Marco Rubio, quien aseguró que tras los bombardeos “el mundo es ahora más seguro”.
“¿En serio? ¿Qué pasa con la salud mental en la Casa Blanca? ¿Qué entienden estas personas por seguridad y estabilidad?”, ironizó el vocero, para luego preguntarse cómo se justifica que, si todo está mejor, se haya puesto en máxima alerta a las bases militares de EE.UU. en la región y se hayan intensificado los bombardeos contra Israel.
“Dejen de preocuparse por Irán y resuelvan los problemas de este país”
Pero mientras el régimen mira hacia Oriente Medio, muchos cubanos exigen que ponga los pies en la tierra y se ocupe de las calamidades cotidianas que atraviesa la isla: apagones interminables, calles destruidas, inflación descontrolada y escasez generalizada.
Los comentarios en la propia publicación del noticiero en YouTube reflejan el hartazgo popular frente a lo que muchos ven como un discurso vacío y desviado de la realidad.
“Hasta cuándo los cubanos estaremos obligados a oír mentiras y noticias manipuladas”, dijo un internauta.
“Dejen de preocuparse por Irán y EE.UU. y resuelvan la cantidad de problemas que tiene este país. Ellos son ricos, tienen dinero... Trata que tu casa no coja candela que no la vas a poder arreglar, compadre”, comentó otra persona.
Más directo fue otro cubano, al plantearle: “Oliver, y las consecuencias de nosotros los cubanos aquí en nuestra Cuba, que estamos viviendo días catastróficos sin corriente, sin agua, con los precios altos, las calles destruidas… Oliver, ponte en la vida que llevamos nosotros los cubanos”.
La intervención de Zamora no es un hecho aislado, sino parte de una estrategia del régimen cubano para reafirmar su alianza con Irán, Rusia y otros actores enfrentados a Occidente.
Sin embargo, para muchos ciudadanos, el costo de ese alineamiento es un aumento del aislamiento internacional, que repercute en más sanciones, menos inversión y una economía cada vez más asfixiada.
En un país donde el acceso a lo básico se ha convertido en una lucha diaria, escuchar a sus dirigentes hablar de guerras lejanas y potencias nucleares es, para muchos, una falta de respeto y desconexión con la realidad nacional.
“La ‘prensa’ cubana lleva 66 años mirando a otro lugar, menos a Cuba”, escribió otro usuario con rabia contenida.
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