La violencia volvió a estremecer a Palma Soriano, en la provincia de Santiago de Cuba, con un hecho ocurrido recientemente que dejó un fallecido y un herido de gravedad, en lo que vecinos y testigos consideraron un presunto ajuste de cuentas.
La víctima mortal fue identificada como Norge Hernández Matos, quien recibió una herida de arma blanca. Según el periodista indepenidente Yosmany Mayeta Labrada, fue atendido inicialmente en el Cuerpo de Guardia de Adultos del municipio, donde se intentó estabilizarlo antes de remitirlo al Hospital Provincial de Santiago de Cuba.
Sin embargo, denuncias recogidas por el comunicador en su publicación de Facebook señalaron que en ese centro no se procedió a la intervención quirúrgica que podía salvarle la vida, y que murió sin ser operado. Al momento de redactar esta nota, las autoridades y medios de prensa oficialista guardan silencio sobre el lamentable suceso.
En el mismo incidente, otro hombre sufrió una grave lesión en una mano, con la presunta pérdida de varios dedos. Las circunstancias exactas del hecho aún se investigan, aunque testimonios referidos por Mayeta Labrada apuntan a un ajuste de cuentas como posible causa.
Este suceso se produce en medio de una ola de violencia que golpea a Santiago de Cuba, donde los ataques con armas blancas y agresiones en vía pública se han vuelto frecuentes. Solo en los últimos días, se han reportado al menos tres hechos graves en la provincia oriental.
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El pasado 9 de agosto, un joven de 32 años irrumpió armado con un cuchillo en el Policlínico Sur de Palma Soriano, donde apuñaló a una enfermera, a un custodio y a otra persona presente en el lugar.
La enfermera recibió varias puñaladas en el pecho y tuvo que ser operada de urgencia en el Hospital Provincial Saturnino Lora. Aunque la versión oficial señaló que el agresor fue detenido por la policía, varios testigos afirmaron que fueron las propias personas presentes quienes lo redujeron y amarraron antes de la llegada de los agentes.
Menos de 24 horas después, Santiago de Cuba fue escenario de dos ataques con arma blanca. El primero ocurrió en la Avenida 40 del Reparto Nuevo Vista Alegre, donde Yudel Vegue Kindelán fue apuñalado en dos ocasiones —una de ellas en el cuello—, quedando en estado crítico.
El segundo tuvo lugar la noche siguiente, durante una fiesta de verano en el camino vecinal entre Palma y El Cobre, donde Deniel Veranes, padre de dos niños pequeños, murió tras recibir una puñalada directa al corazón en medio de una discusión.
Santiagueros en redes sociales denuncian que estos episodios comparten un patrón preocupante: fiestas y actividades públicas sin presencia policial, consumo excesivo de alcohol, proliferación de drogas y ausencia de mecanismos preventivos efectivos.
Mientras las autoridades mantienen abiertas las investigaciones, la población de Palma Soriano y Santiago de Cuba vive con temor, reclamando acciones concretas para frenar la escalada de violencia que, según muchos, ya forma parte de la vida diaria en la isla.
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