“En estos momentos soy un campesino menos, me dejaron desamparado”, así define su situación actual el joven Pablo Alexis Mendoza Rivero, que filmó el momento en que le decomisaban sus vacas por decisión de la Comisión Agraria municipal de Boyeros, en La Habana.
En declaraciones para Cubanet, Mendoza Rivero precisa que él ingresó a la Cooperativa a través de una campesina a la que ayudaba. Añade que luego ella enfermó y le hizo un poder notarial para que él gestionara el ganado que ella tenía y sus tierras.
Sin embargo, la campesina permutó la casa y, según afirma el joven, la vivienda la compró la hija del Exdirector Nacional de Ganado Menor por 10 mil dólares, quien reclamó las tierras a pesar de que él tenía documentos que acreditaban la dejación.
Tras varios episodios que el joven campesino describe como una guerra de poderes, comprobó que no se valoraba su trabajo, que lo maltrataban, lo avasallaban y que lo que menos se juzgaba eran sus niveles de productividad y sus deseos de trabajar la tierra y la ganadería.
La conclusión es que le dijeron que él no tenía tierras ni ganado y le quitaron todo. En el momento de confiscarle las vacas y la tierra, explica que llevaba seis años trabajándola.
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