La empresa Cubana de Aviación estaría en conversaciones con la empresa Vietjet Air, de Viet Nam, para alquilar algunos de sus aviones y tratar de aliviar la desastrosa situación por la que atraviesa el servicio de vuelos nacionales.
Un mensaje que circula en las redes sociales, enviado originalmente a directivos de la compañía, informa que una comisión integrada por Luis Godoy, director adjunto de Cubana, junto a funcionarios de los ministerios de Transporte y Comercio Exterior, se encuentran en la nación asiática para negociar el arrendamiento de aeronaves y tripulaciones, así como la creación de una empresa mixta.
En el documento se reconocen las “dificultades que tiene” la empresa “para poder cumplir con el objeto social” y que aún no se sabe que se hará “para recuperar a Cubana”.
Vietjet Air es una aerolínea internacional de bajo costo de Vietnam. Fue la primera aerolínea de nueva generación de propiedad privada que se estableció en el país, y aunque recibió su aprobación para operar en 2007, su lanzamiento no fue hasta diciembre de 2011.
La empresa, con sede en Hanoi, tuvo en 2013 su primer vuelo fuera de sus fronteras, por ello es la primera aerolínea privada vietnamita en ingresar al mercado internacional. Actualmente vuela a 16 destinos nacionales y cinco internacionales.
Cuba y Vietnam han fortalecido su cooperación en los últimos meses, según ha informado la prensa oficialista.
En marzo representantes de empresas vietnamitas visitaron la Isla, donde suscribieron acuerdos con sus homólogos cubanos en las esferas de turismo, farmacia y biotecnología, industria alimentaria y básica, energía renovable y materiales de la construcción.
En ese momento, el embajador de la nación asiática anunció que para 2020 el volumen del intercambio bilateral será de 500 millones de dólares.
Cuba acude ahora a su segundo socio más importante de la región asiática para tratar de recuperar una flota sumida en el caos de la falta de aparatos y el descrédito.
La crisis llegó a su punto álgido el pasado 18 de mayo, cuando un Boeing 737-200, rentado a la compañía mexicana Global Air, se estrelló poco después de haber despegado del Aeropuerto Internacional José Martí en La Habana.
En el accidente murieron 112 personas, entre pasajeros y tripulantes.
Un mes después, la aerolínea canceló casi todos sus viajes debido a la falta de aeronaves.
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