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Memoria del exilio: Entre ausencias, gritos y susurros

Dos íntimas amigas, desde la infancia, separadas por un océano de añoranzas, oportunidades, escapes, reencuentros pendientes…

A media voz © Cartel de la película
A media voz Foto © Cartel de la película

Este artículo es de hace 3 años

“- Busco una imagen que te hable de mí.”

Así principia A MEDIA VOZ*, la emotiva película realizada por Heidi Hassan y Patricia Pérez Fernández que acaba de obtener el premio al mejor documental en la más reciente edición del festival de cine de la Habana.

*. OJO: Dos mujeres detrás de la cámara. WHO RUNS THE WORLD: GIRLS!!!!

Una exploración, tan sentida, que dinamita toda entraña.

Un material que todos los cubanos - exiliados, repatriados, recalcitrantes, o RE-patriotas - deberían tener la ocasión de ver.

Complace recomendarla.

Documental y ficción que se entremezclan en una coreografía de sentimientos, también, encontrados.

Y que desatan un vendaval conmovedor en el espectador. * Una joya para todos los sentidos. Un estímulo a la razón.

* Sobre todo, para los cubanos. ¡Deja la chola echando humo!

Fotos, cartas, recuerdos, archivos personales, sueños truncos, reflexiones distantes, mas, jamás tardías…

Fragmentos de vida editados en un contemporáneo lenguaje cinematográfico que reconstruye una desesperanza triste, una agonía honda.

Horas marcadas, pausas eternas, largos silencios.

Dos íntimas amigas, desde la infancia, separadas por un océano de añoranzas, oportunidades, escapes, reencuentros pendientes…

“Alejarte del pasado lo suficiente, para que no pese.”

Pesan muchas de sus frases, se clavan en la mente.

Originales imágenes que evocan - convocando a - la familiaridad.

A la vez que a su pérdida.

Y con ello, advierte, también, a la ruptura de la familia cubana.

Uno de los “logros” indiscutibles de ese autodenominado “proceso revolucionario”.

Que nunca es lo mismo. Pero, siempre es igual.

La insufrible e incesante continuidad de la que tanto se vanaglorian, en discursos, los que señorean “en nombre del pueblo”.

Desde que nos borraron la “libre elección” y la “voluntad personal” *

* En sabias palabras de una de sus realizadoras dentro del filme.

Un canto al exilio. Una ventana de comprensión de lo incomprensible del destierro.

Que suena a alarido, a lamento, a rugido, a clamor.

Voces - de las más jóvenes generaciones - también, echadas de casa.

Obligadas a partir.

Separación, huida, lejanías, nostalgias…

Alucinante y súper creativo es su trabajo de sonido.

A veces la banda sonora va por un lado y las imágenes por otro. Para llevarnos ambas, en conclusión y, de todos modos, a un mismo sitio marcado por la desesperanza. Una tristeza insondable por lo que nos ha tocado vivir.

Que es un logro para el cine cubano, independiente, realizado por MUJERES, fuera de la isla, nadie lo duda.

Pero, que la fiesta no nos impida ver que la premia el mismo festival* que no debió - de ningún modo posible - rechazar la proyección de ¿ERES TÚ, PAPÁ?, también independiente, con una excelente realización que le ha acarreado importantes lauros internacionales. *

* Entre tantos otros sonados ejemplos en la historia de ese mismo certamen.

Que, además, en esta reciente edición decidió premiar, con un CORAL DE HONOR, a Manolito Pérez, un cineasta de una sola obra notable - altamente discutible* - en su casi inexistente, o fantasmal carrera: EL HOMBRE DE MAISINICÚ*, pero, con horas de militancia, léase, absoluto dogmatismo y rigidez comunista.

* Recuerdo la graciosa anécdota de un cubano haberla visto anunciada, fuera de Cuba, como EL HOMBRE MÁS SÍNICO y pensar que era un biopic sobre Fidel.

Y que no ha dejado de ir, diariamente, a una oficina donde se encierra, nadie ha sabido nunca, a hacer qué. *

* Al parecer, analiza la situación política internacional con la lectura de las cuatro páginas del Granma y las otras cuatro del Juventud Rebelde, redacta informes, traza directivas que van hacia ninguna parte, o evalúa y “lee” proyectos. Hace mucho, en los inicios de mi carrera, le pasé, para su valoración un extenso guion para un documental - que nunca se llegó a hacer - sobre el cine cubano de los años 60. Demoró mucho tiempo en devolvérmelo. Cuando lo hizo, luego de mi obstinada insistencia, pude notar, con encono, que no había leído absolutamente nada. Yo había pegado varias puntas de unas paginas delanteras, aunque ya intermedias. Y esas cuartillas regresaron a mí en el mismo estado. Él fue uno de los más encarnizados enemigos de NADA. El mismo que daba golpes en una mesa, mencionando la presencia de un agente enemigo -como inculpándome - cuando el caso de mi censura pasó al cine. Un comisario del arte. El que, asimismo, gritaba, en la esquina de 23 y 10, una vez terminada la reunión de los cineastas contra la censura, “es que así no se presiona a Raúl Castro”. Es famoso el cuento de haberle visto llegar desde su casa - y devolver, además - con la jaba de la basura hasta su puesto de trabajo.

“Tengo que lograr que filmar vuelva a ser mi día a día. Regresar a mi elemento.”

El precioso testimonio de estas muchachas estimula a intentar terminar proyectos pendientes.

No es nada fácil. Ni podrá ser inmediato.

Algunos colaboradores cercanos indagan, preocupados, queriendo saber qué ha pasado con el proyecto SEMEN. *

* Basada en la obra de Yunior García que, desde su concepción original, en el guion, se concibió como una película inconclusa, resultante de una censura.

Que se llegó a filmar - en un ajustado plan de rodaje de tan solo ocho madrugadas, sin permisos oficiales, más, una pequeña ayuda de la Embajada de Noruega - y tiene un primer corte de edición, pero…

Mi vida ha cambiado drásticamente. *

* Eso debo incluirlo en un argumento que versa sobre la imposibilidad de un cineasta de terminar una obra.

Y creo que también he de hacerlo con ese proyecto que, espero convertir, además, en un material sobre todo lo acontecido alrededor de mi caso.

Mi versión. Mi visión. Lo que pienso y aun defiendo.

Esperemos poder hacerlo cuanto antes. *

* Aunque, para eso, necesite asentarme económica, pero, sobre todo, emocionalmente.

Todos los planos filmados precisan de una intervención digital que debo hacer - probar, experimentar, deglutir - y eso requiere, sobre todo, de una potente computadora, con memoria suficiente, para almacenar-culminar todo el arduo proceso de trabajo.

Intento, de todo modo, hacer algunas pruebas en mi pequeña laptop. * Y voy conformando el resto en la cabeza.

* Al tiempo que me ejercito como editor en PREMIER y disfruto haciendo corticos, bautizados como: MICRO CINEMA

“Ahora tengo deseos de volver a empezar, pero, todavía, no consigo imaginar por dónde.”

Gracias, chicas, por encender esa luz - que sabía no apagada - en medio de tantas sombras.

Gracias.

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Artículo de opinión: Las declaraciones y opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad de su autor y no representan necesariamente el punto de vista de CiberCuba.

Juan Carlos Cremata Malberti

Director de cine y guionista cubano. Se graduó en 1986 de Teatrología y Dramaturgia, en el Instituto Superior de Arte (ISA) de La Habana, posteriormente cursó estudios en la Escuela Internacional de Cine de San Antonio de los Baños graduándose en 1990.


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