La alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, se solidarizó con la activista por la democracia cubana Anamely Ramos, luego de que el régimen castrista le prohibiera regresar a su patria.
Levine Cava acudió el miércoles por la noche a las afueras del emblemático restaurante Versailles de La Pequeña Habana, donde Anamely decidió continuar su protesta para exigir al gobierno cubano que respete su derecho a regresar a su país.
"La artista cubana Anamely Ramos merece el derecho de regresar a casa y denunciar los abusos a los derechos humanos que ocurren en Cuba. Estoy con ella y todos los cubanos. El tiempo para la libertad es ahora", escribió la alcaldesa en su cuenta de Twitter.
La política demócrata sostuvo una conversación con la joven cubana, durante la cual se interesó por su situación actual.
"Estoy acá para dar apoyo a esta señorita, tan linda, que esta luchando para su país, para los que viven allí y con el apoyo de todos acá en Miami, somos unidos", dijo Levina Lava a la prensa.
La alcaldesa también dio su aprobación a la estancia de Anamely en una carpa improvisada en los alrededores del restaurante, y se comprometió a ayudarla a conseguir el permiso para seguir allí.
"Estamos de acuerdo en que ella tiene que tener un espacio donde poder seguir adelante con la protesta", afirmó.
Tras su decisión de continuar su protesta en un espacio público, decenas de cubanos se acercaron a Versailles a mostrarle su apoyo a Anamely, luego de que se viera obligada a salir del Aeropuerto Internacional de Miami.
El gobierno de Estados Unidos, así como diversas personalidades e instituciones dedicadas a la política, han dado su respaldo a la activista cubana, luego de que American Airlines le impidiera abordar su avión con destino a su país de origen y residencia.
"La artista y educadora cubana Anamely Ramos tiene derecho a regresar a su propio país", subrayó en Twitter el subsecretario de Estado para Asuntos Hemisféricos de EE.UU., Brian A. Nichols.
Por su parte, la congresista cubanoamericana María Elvira Salazar llamó "cobardes" a la familia Castro y al gobernante Miguel Díaz-Canel por su acción contra Anamely Ramos.
"La familia Castro y su delfín Díaz-Canel siguen administrando Cuba como su finca particular, eligiendo quién tiene permiso para entrar. Pero así muestran cuánto miedo le tienen a las voces que denuncian la falta de libertades en la Isla cárcel. ¡Cobardes!", expresó Salazar.
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