El cubano Miguel Sánchez, residente en Argentina desde hace 17 años y ganador del cuarto puesto en el Campeonato Panamericano de la Pizza, expresó que dejar todo en Cuba fue como arrancarle la vida.
"Para mí, como emigrante, tener que irme de mi país, tener que dejar mi familia, mis amigos, mis raíces, para otros significa otras cosas; a mí me arrancaron una vida desde muy joven", declaró a la agencia de noticias independiente CubaNet.
Vestido con su traje de chef, que lleva bordada la frase "Patria y Vida", Sánchez no puede evitar mostrarse emocionado cuando habla del tema porque son muchos los sentimientos encontrados.
"Creo que es momento de que [los cubanos] nos demos cuenta de la situación en que estamos", lamentó
Sobre la situación actual de Cuba, el migrante considera que el gobierno comunista se justifica con el embargo, una justificación que en realidad no existe.
¿Qué pasa con Cuba hoy? Que tenemos las mismas necesidades desde hace 60 años", subrayó. "Cuba lo que necesita verdaderamente es un apoyo político porque el pueblo no puede luchar contra el Ejército".
Sobre el producto con el que se presentó en el campeonato donde obtuvo el cuarto lugar, dijo que intentó reunir los elementos del tradicional trago, a luego que el jurado le pidiera representar una pizza de su país.
"En Cuba apenas tenemos para comer, cómo hago para presentarle a un jurado de chef notables una pizza de Cuba. Entonces lo que se me ocurrió fue representar el trago más famoso que tenemos: el mojito", relató.
En el encuentro donde participó el cubano estuvieron también representados los países de Estados Unidos, México, Haití, Venezuela, Colombia, Perú, Paraguay, Brasil, Uruguay, Chile y Argentina.
Sánchez, de 40 años, nació en el barrio de Jesús María, en La Habana, y lleva 17 años en la provincia de Buenos Aires, donde estableció su negocio, al que bautizó como “Mima pizzería”, y que se ubica en la ciudad de Berazategui.
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