El último paciente que permanecía hospitalizado a consecuencia de las heridas producidas por la explosión del hotel Saratoga, recibió el alta médica este martes, según el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) de Cuba.
“En el día de ayer [martes] recibió el alta médica el último paciente que se encontraba hospitalizado. Hasta las 10:00 a. m. del 29 de junio se reportan 99 personas lesionadas, de ellas ninguna se encuentra hospitalizada, 52 pacientes recibieron el alta médica y 47 fallecieron”, indicó el MINSAP en un comunicado.
Con el alta del último paciente ingresado, las autoridades sanitarias del país agradecieron “a todos los organismos, organizaciones y pueblo en general, que ha apoyado las acciones que realizamos con los pacientes y sus familiares, así como, la preocupación mostrada por los pacientes hospitalizados”.
Sin embargo, transcurridos 54 días de la terrible explosión, todavía quedan muchas incógnitas y sombras en torno a unos hechos que provocaron la muerte a 46 cubanos y una ciudadana española, cuya pareja –ya de vuelta en España- estuvo entre el centenar de heridos que se reportaron en el trágico incidente.
“Hace un mes y diez días que yo perdí a mi hija por la ‘bomba’ que pusieron en el Saratoga y a mi casa no ha ido nadie a darme una explicación ni de lo que pasó, de lo que fue, ni a ponerme una mano en el hombro como una ciudadana de este país que soy”, protestó la madre de la cubana Shady Cristina Cobas Mesa, una de las víctimas de la explosión.
"Ella estaba trabajando para este país y este gobierno cuando pusieron la bomba y murió. Fue la última víctima que sacaron del Saratoga. Seis días estuve en el parque", se quejó la madre de una joven que tenía apenas 27 años en el momento de su muerte.
"Yo quiero que este país me dé una respuesta, ya que Díaz-Canel estaba el Día de las Madres en el Capitolio bailando con el presidente de México”, exigió la madre de la fallecida, refiriéndose a la polémica celebración que protagonizó el gobernante cubano junto a su entonces invitado oficial, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador, apenas transcurridas unas horas de la mortífera explosión, que dejó sin vivienda a casi un centenar de personas y afectaciones en 23 edificios aledaños.
A mediados de junio, fallecía una de las dos últimas personas que seguían hospitalizadas por las lesiones sufridas en la explosión del Hotel Saratoga. Vanesa Sierra Suris, de 44 años, permanecía ingresada en estado grave en el Instituto de Neurología y Neurocirugía.
Según informó el MINSAP, tras el lamentable deceso quedaba un solo paciente ingresado en el Hospital Clínico Quirúrgico Hermanos Ameijeiras. “Se trata de un hombre que también está en estado grave”, indicó la institución.
Dos días antes del fallecimiento de la última víctima mortal, todos los niños que fueron hospitalizados por las heridas provocadas por la explosión del hotel Saratoga recibieron el alta médica.
En este desastre, ocurrido el 6 de mayo pasado a causa de una supuesta fuga de gas, fallecían cuatro menores de edad, se lesionaron 15 niños, de entre dos y 15 años, y cinco de ellos permanecieron durante varios días en la sala de terapia intensiva del Hospital Pediátrico Juan Manuel Márquez, de Marianao.
Como coinciden en señalar muchas voces de la sociedad civil cubana, la explosión del Saratoga apunta directamente al Grupo de Administración Empresarial S.A. (GAESA), bajo control del general de división y ex yerno del dictador Raúl Castro Ruz, Luis Alberto Rodríguez López-Calleja, conocido como el hombre que maneja la caja fuerte y las finanzas del régimen cubano.
Sin embargo, las autoridades cubanas han abordado la tragedia con su habitual estrategia de ocultar responsabilidades, ocuparse bajo manto de "la investigación" (siendo el entramado empresarial militar parte en los hechos), “atender” a las víctimas y dejar que pase el tiempo entre el ruido y la furia que genera la decadencia de la dictadura más longeva de occidente.
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