Estelvina Rodríguez, madre del preso del 11J Dayron Martín, denunció ante Naciones Unidas la situación de vulnerabilidad de su hijo sentenciado por participar en las protestas antigubernamentales del verano pasado.
“Dayron Martín Rodríguez, paciente esquizofrénico, fue condenado a 30 años d cárcel en Cuba, por su participación pacífica en las protestas del 11J”, informó este lunes la ONG Freedom House en Twitter.
La intervención de la madre estuvo bajo la sombrilla de Freedom House durante un diálogo con el Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias de la ONU.
En su alocución, Estelvina asegura que su hijo fue sentenciado “por un delito contra la seguridad del Estado que no cometió”, dijo en referencia al delito de sedición por el que han condenado a 169 manifestantes.
“El 12 de julio del 2021, mi hijo, de 37 años de edad, fue uno de los tantos jóvenes que salieron pacíficamente a protestar en La Habana para exigir libertad, un cambio de gobierno y mejoras económicas”, precisó en referencia a los acontecimientos en el barrio La Güinera, en el municipio habanero de Arroyo Naranjo.
“La vida del mi hijo corre peligro por ser un paciente esquizofrénico que estuvo ingresado previamente en un sanatorio mental por intento de suicidio. Mi hijo no cuenta con la atención médica ni la medicación adecuada. El necesita ser liberado pues es inocente”, denunció la madre.
También, pidió públicamente a las autoridades cubanas que trasladen a su hijo a un centro médico con las condiciones que garanticen su salud, ante el peligro de que Martin atente contra su vida por la enfermedad mental que padece, cuestión que la familia ha venido denunciando.
“Imploro a este comité de Naciones Unidas que interpele al gobierno cubano por el estado de salud de mi hijo y que comience una investigación sobre las verdaderas causas de su detención. Mi hijo es inocente y paciente esquizofrénico”, sentenció.
Dayron Martín Rodríguez fue detenido el 12 de julio de 2021 tras acudir voluntariamente a la estación de policía a buscar su teléfono ocupado previamente por las autoridades. Desde allí fue enviado a 100 y Aldabó y luego al Combinado del Este, donde actualmente se encuentra.
De acuerdo con los registros de Justicia 11J, el habanero ha estado privado de visitas familiares. Le han permitido llamar, pero con un guardia delante para escuchar lo que dice. En el juicio de apelación celebrado en mayo, el tribunal redujo su sentencia a 22 años de privación de libertad.
La artista y activista Salome García Bacallao, miembro del equipo de Justicia 11J, ha indicado que los manifestantes del barrio La Güinera fueron “testigos del asesinato extrajudicial de Diubis Laurencio Tejeda, y por eso los condenan a pasar, en algunos casos, más años de los que han vivido”, además de que “también piensan que porque son de barrios marginalizados nadie va a reclamar por ellos”.
Desde el 11 de julio de 2021, más de 670 personas continúan en prisión por su participación en las protestas antigubernamentales.
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