Una edificación de dos plantas que estaba abandonada y cuya demolición se había aprobado, se derrumbó en la madrugada de este jueves en La Pequeña Habana, en Miami, debido a las intensas lluvias y vientos de los dos últimos días.
Aunque no se reportaron heridos en el incidente, dos familias vecinas fueron desplazadas.
Parte de los escombros del derrumbe cayeron sobre el techo de una vivienda aledaña a la edificación que se derrumbó, aunque la familia residente en esa casa logró salir de forma segura. Otra familia fue evacuada por la parte de atrás de la estructura siniestrada.
El incidente ocurrió en el 1790 de la calle 3 y la avenida 18 de La Pequeña Habana de Miami.
Los vecinos residentes en la zona explicaron en declaraciones a la prensa local que el sorpresivo derrumbe ocurrió sobre las 3:00 a.m., momento en que sintieron un fuerte ruido, como si fuera una bomba.
Una mujer de origen hispano asegura que vivió durante 14 años junto a su familia en la casa que se derrumbó -que tenía más de 90 años de edificada- y se siente afortunada de haber abandonado a tiempo la vivienda.
“Gracias a Dios pude salir de ahí hace tres meses, estamos bien mis hijos, mi esposo y yo, todos estamos bien", explicó.
Vecinos de la zona informaron a las autoridades que una persona indigente solía dormir en la edificación abandonada.
Durante varias horas equipos de rescate se mantuvieron buscando entre los escombros con unidades caninas y maquinaria, pero aseguraron que no encontraron restos mortales
Iggy Carroll, portavoz de los bomberos de Miami, indicó que tras realizar las debidas comprobaciones, concluyeron que la casa de dos plantas estaba abandonada en el momento del colapso.
Las intensas lluvias y el mal tiempo que afecta al sur de la Florida desde la noche del martes han dejado importantes inundaciones y destrozos en los condados de Miami-Dade y Broward.
El Servicio Meteorológico Nacional emitió un aviso de inundaciones repentinas para la mayor parte de los condados, que se mantuvo vigente hasta las 6 a.m. de este jueves.
Este miércoles las olas alcanzaron hasta los 10 pies de altura, mientras que los vientos de 30 millas por hora afectaron a negocios cercanos a las playas, que tuvieron que cerrar como medida de precaución.
Imágenes difundidas en redes sociales han dejado claro testimonio del infierno meteorológico que han vivido los residentes del sur de Florida en las últimas horas, donde incluso algunos conductores quedaron atrapados en el interior de sus vehículos.
Está previsto que en las primeras horas de este jueves el mal tiempo persista, aunque las condiciones del tiempo irán mejorando hacia la segunda mitad del día.
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