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La decisión del Banco Metropolitano de conducir a los clientes reservar un turno en la aplicación Ticket para poder presentar quejas o reclamaciones ha generado malestar en redes sociales y cuestionamientos incluso desde voces cercanas a la prensa oficialista.
Según informó la institución en su página de Facebook, los usuarios deberán solicitar cita previa a través de la aplicación Ticket, con hasta una semana de antelación y no menos de 24 horas, para acudir al Departamento de Quejas y Peticiones.
La medida pretende organizar la atención, que se brindará en la oficina central de La Habana Vieja los lunes, miércoles y jueves entre 9:00 a.m. y 1:00 p.m.
“Reserva de turnos por Ticket para atender las quejas y peticiones de los clientes. Libre de costo”, indicó el comunicado, casi apelando al cinismo de la “gratuidad”.
La periodista oficialista Ana Teresa Badía expresó públicamente su inconformidad: “¿En serio que para yo quejarme tengo que sacar un turno en Ticket e ir el día que me citen o únicamente quejarme por los canales que el Banco Metropolitano dice ahí?”.
La vocera del régimen fue inquisidora en su comentario: “Error, las personas utilizan para quejarse el canal que estimen”.
Badía aseguró además que no dejará de expresar sus opiniones en redes sociales pese a las críticas recibidas.
La comunicadora recordó que, de acuerdo con tendencias internacionales en comunicación, ninguna organización seria excluye a las plataformas digitales de los mecanismos de quejas y atención, pues son espacios donde se gestiona la reputación y se pueden anticipar crisis.
Mientras tanto, la publicación del banco mantiene que, además de Ticket, los clientes disponen de otras vías como el correo electrónico, la plataforma Bienestar y la atención en las sucursales bancarias, aunque el nuevo requisito digital es el que concentra las críticas.
Las críticas de usuarios tampoco se hicieron esperar. Ricardo Castillo apuntó que “la primera queja es precisamente esa: tener que reservar para quejarse”, recordando además que la institución sigue sin ofrecer una respuesta convincente sobre el uso de las tarjetas en MLC.
Otros, como Miladis Fernández, reaccionaron con ironía asegurando que “ya solo queda reír porque ya se ha llorado bastante”, mientras Gabo Pére bromeó con que “habría que saber si hay límite de quejas por persona, no vaya a ser que alguien se pase”.
Jorge Oramas resumió el malestar con un comentario lapidario: “Esto sucede cuando la incapacidad y la ineptitud deciden”. En la misma línea, Irene Orozco exclamó: “Dios mío, esto es lo último ya”, y Dayana Díaz relató que lleva un mes esperando un depósito en su tarjeta de moneda nacional sin que haya llegado, denunciando además que “las quejas se las pasan por alto como una burla y una falta de respeto”.
La inconformidad también apuntó al carácter centralizado de la medida. Amarilys Argote cuestionó que “todo el que no pueda acceder tenga que ir a la oficina central, como si eso no fuera precisamente para que la gente no se queje”.
Y para Delphos M. Millan, la disposición refleja “lo más ridículo que se ha leído: que para quejarse haya que sacar un turno. La gente se queja donde le dé la gana y a la hora que sea. No salen de un meme para entrar en otro”.
Las reacciones muestran un consenso inusual: tanto ciudadanos como periodistas alineados con el oficialismo coinciden en que la disposición del Banco Metropolitano resulta absurda, burocrática y desconectada de la realidad de sus propios clientes.
El colapso del sistema bancario cubano ha generado un profundo malestar entre los ciudadanos, que enfrentan obstáculos cada vez mayores para acceder a su propio dinero.
La periodista jubilada Iraida Calzadilla expuso con crudeza esta realidad al relatar cómo, mes tras mes, debe esperar durante horas frente a bancos habaneros para cobrar una pensión incompleta, rodeada de coleros y condiciones indignas.
Su testimonio pone rostro a una crisis que golpea especialmente a los adultos mayores, quienes sufren largas filas, falta de efectivo y escasa infraestructura bancaria.
La situación no es aislada. El caos en los bancos cubanos se ha vuelto cotidiano, con ciudadanos que denuncian la imposibilidad de extraer dinero en efectivo, límites que cambian constantemente y cajeros automáticos sin fondos.
Las personas evitan incluso las transferencias electrónicas por temor a no poder retirar el dinero. La economía informal se ha visto impulsada por la compraventa de turnos para acceder a cajeros, mientras el sistema bancario muestra signos de colapso estructural, agravado por apagones frecuentes y la ausencia de soluciones efectivas.
En un intento por paliar la crisis, el Banco Metropolitano lanzó una modalidad de reserva de turnos a través de la plataforma Ticket, dirigida a clientes familiarizados con herramientas digitales.
Aunque esta medida busca reducir las colas y facilitar trámites esenciales, solo se implementará en un 10% de las sucursales habaneras, aquellas menos afectadas por interrupciones eléctricas. La iniciativa, además, no sustituirá la atención por orden de llegada, por lo que su impacto real aún es incierto.
Preguntas frecuentes sobre el Banco Metropolitano y el uso de la aplicación Ticket en Cuba
¿Por qué el Banco Metropolitano exige reservar un turno para presentar quejas?
El Banco Metropolitano ha implementado este sistema de reservas para organizar la atención a los clientes en su Departamento de Quejas y Peticiones. La medida busca manejar mejor las consultas y reducir las aglomeraciones, pero ha generado críticas debido a que no todos los cubanos tienen fácil acceso a la tecnología necesaria para hacer las reservas mediante la aplicación Ticket.
¿Cuáles son las principales críticas a la aplicación Ticket en Cuba?
Las críticas hacia la aplicación Ticket se centran en la falta de acceso a la tecnología por parte de muchos cubanos, las fallas técnicas, y su uso como una barrera para acceder a servicios esenciales en medio de una crisis económica. La imposición de este sistema ha sido vista como una forma de exclusión digital que no considera las condiciones tecnológicas ni económicas reales de la población cubana.
¿Qué alternativas ofrece el Banco Metropolitano para presentar quejas si no se puede usar Ticket?
Además de la aplicación Ticket, el Banco Metropolitano menciona el uso de correo electrónico, la plataforma Bienestar y la atención en sus sucursales bancarias como alternativas para presentar quejas. Sin embargo, la efectividad de estas vías ha sido cuestionada por los usuarios, quienes enfrentan dificultades logísticas y tecnológicas para acceder a ellas.
¿Cómo afecta la digitalización forzada de los servicios bancarios a los cubanos?
La digitalización forzada de los servicios bancarios en Cuba, como la eliminación de comprobantes impresos y el uso de aplicaciones como Ticket, afecta principalmente a aquellos que no tienen acceso a internet o dispositivos móviles, como los adultos mayores. Esto crea una brecha digital que excluye a segmentos vulnerables de la población, complicando el acceso a servicios financieros básicos.
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