Un video de cámara corporal recientemente divulgado ha expuesto en detalle el tenso y polémico momento en que agentes del Sheriff del condado Miami-Dade arrestaron al capitán del Departamento de Bomberos y Rescate de la Ciudad de Miami, Máximo Vásquez Jr., de 42 años.
Las imágenes, que se han difundido esta semana, muestran el desarrollo de un enfrentamiento verbal y físico que culminó con el veterano bombero esposado y acusado de varios delitos menores.
El material audiovisual -obtenido por varios medios locales- ha dado nueva dimensión a un incidente ocurrido en la madrugada del 2 de junio frente a la residencia de Vásquez, en la cuadra 9800 de la calle 163 del suroeste de Miami-Dade.
El capitán había llamado al 911 para reportar la desaparición de su esposa, pero lo que empezó como una petición de ayuda terminó en un arresto marcado por insultos, gritos y forcejeos.
Un encuentro cargado de tensiones y exabruptos
En el video, los agentes llegan a la vivienda de Vásquez y lo encuentran visiblemente alterado. La conversación pronto degenera en un intercambio hostil.
-“¿Te dije que no quería un informe?”, espeta el capitán en un tono desafiante.
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-“Le pregunté si quería un informe”, responde uno de los agentes.
-“¿Y mi respuesta fue?”, insiste Vásquez.
-“Dijiste: ‘Vete tú mismo’”, replica el agente.
El diálogo continúa deteriorándose, marcado por expresiones agresivas por parte del bombero: “¿Hablas en serio, hermano?” y más adelante, en tono airado, lanza: “¡Tío, sois unos [censurados] retrasados mentales! Lo juro por Dios, tío”.
Pese al intento de los oficiales por recopilar datos para el reporte de persona desaparecida -como la estatura, el peso y la ropa que llevaba la mujer- el capitán respondió con creciente frustración y ataques verbales.
“Es como tratar con niños”, se le escucha decir.
Cuando los agentes finalmente le entregan una tarjeta con el número del caso, Vásquez lanza la tarjeta hacia ellos y pronuncia: “fuck... tú, hermano”.
En ese momento, la situación escala rápidamente. Los agentes lo sujetan, lo tiran al suelo y lo esposan.
“Mi esposa está desaparecida, ¿esto es todo lo que consigo? Que te jodan, hermano”, grita Vásquez mientras es inmovilizado.
Cargos presentados y respuesta institucional
El arresto de Vásquez se formalizó con cuatro cargos menores: agresión a un oficial de la ley, resistencia sin violencia, alteración del orden público y uso indebido del sistema 911.
Según el informe policial, el capitán “llamó al 911 en dos ocasiones durante la noche… solo para menospreciar a los agentes que llegaron”.
Tras el arresto, Vásquez compareció ante un tribunal de fianzas, donde el juez no encontró causa probable para el cargo de resistencia a un agente del orden. Aun así, los demás cargos permanecieron activos.
Posteriormente, el Departamento de Bomberos y Rescate de la Ciudad de Miami anunció que iniciaría una investigación interna.
“El Departamento de Bomberos y Rescate de la Ciudad de Miami tiene conocimiento de un incidente que involucra a un bombero con 15 años de experiencia”, indicó en un comunicado inicial.
“Una vez que se establezca contacto, el departamento iniciará una investigación interna exhaustiva de acuerdo con nuestras políticas y procedimientos”, añade el documento.
Dicha investigación fue finalmente concluida, y según las autoridades del cuerpo de bomberos, Vásquez cooperó plenamente con el proceso. A día de hoy, ha sido reincorporado a sus funciones habituales.
Un episodio impulsado por la desesperación
Aunque el capitán se disculpó tras su detención -“Oye, hombre, me disculpo por ello”- su comportamiento no fue bien recibido por los agentes presentes.
“No, tío, eso no está bien, hermano. No, tío, estás retorcido, amigo”, se escucha decir a uno de ellos en respuesta.
La próxima comparecencia judicial de Máximo Vásquez está programada para el 11 de septiembre.
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