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Disminuye riesgo de lluvias ácidas tras incendio en Matanzas, según el CITMA

"La lluvia ácida no sólo depende de que haya emisiones de contaminantes ácidos a la atmósfera, sino de que su concentración sea muy alta para que se produzca este fenómeno", dijo el organismo estatal.

Incendio en Matanzas © Facebook / Cubadebate
Incendio en Matanzas Foto © Facebook / Cubadebate

Este artículo es de hace 1 año

El Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA) de Cuba informó que ha disminuido el riesgo de lluvias ácidas tras el incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas.

Rosemary López, responsable del Centro de Contaminación y Química de la Atmósfera del Instituto Citma de Meteorología, explicó a la revista Juventud Técnica que las concentraciones de ácidos en la atmósfera se han dispersado y el riesgo de que se produzcan lluvias ácidas ha bajado considerablemente.

Comentó al respecto que la llamada "lluvia ácida no sólo depende de que haya emisiones de contaminantes ácidos a la atmósfera, sino de que su concentración sea muy alta para que se produzca este fenómeno".

"Se podría estar emitiendo este tipo de contaminantes y, al mismo tiempo, haber una gran presencia de polvo. Ese polvo contrarrestaría la composición básica de la lluvia, que neutralizaría los acidificantes", subrayó la experta.

Dijo que ese fenómeno aparece cuando hay "grandes concentraciones de contaminantes ácidos en la atmósfera" y existen condiciones húmedas para la aparición de las lluvias.

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"Sin embargo, una vez que los contaminantes son transportados y transformados (en otras sustancias debido a las reacciones que pueden producirse) la presencia será mucho menor, por lo que la posibilidad de que se produzcan lluvias ácidas es menor", expresó López.

De acuerdo con la experta, la calidad del aire en los lugares afectados también podría restablecerse muy pronto. "Una vez que haya control de estos contaminantes, se recuperará", comentó a la citada publicación.

Odalys Goicochea Cardoso, directora general de Medio Ambiente del Citma, señaló que ahora que el incendio ha sido controlado "se está realizando un proceso de evaluación preliminar del daño ambiental que se ha producido en el lugar" afectado.

"Es importante decir que el costo ambiental dependerá de la permanencia que haya tenido este evento. Y realmente ha sido un incidente que ha durado cinco días. La fuente de emisión como tal se ha detenido, pero habría que analizar con cada uno de los especialistas cómo se ha afectado el medio ambiente", subrayó.

Sobre los efectos para la población de la zona, dijo que las consecuencias inmediatas de un incendio de esta magnitud se evalúan en dependencia de las afectaciones de la emisión de gases y partículas sobre la salud de las personas.

"En este sentido, los colegas del Ministerio de Salud Pública continúan verificando, con base en la vigilancia médica que han diseñado, si hay algún incremento de infecciones respiratorias agudas o lesiones en la piel (daños como consecuencia de un evento como este). Sin embargo, hasta ahora no se ha informado de nada", aseguró Goicochea Cardoso.

La ministra del CITMA, Elba Rosa Pérez Montoya, dijo recientemente que el monitoreo del aire en la zona del incendio –provocado por un rayo el pasado viernes 5 de agosto en la zona industrial de la provincia de Matanzas– mostraba una disminución en la contaminación ambiental.

Señaló que en las imágenes del radar se observaba una disminución de la visibilidad del humo generado por el siniestro.

Estas declaraciones surgieron luego de que varios cubanos confirmaran la caída de una lluvia con cenizas negras en varios territorios de Matanzas y el límite con la provincia de Mayabeque.

El campesino Enrique Viera García, del Valle de Yumurí, mostró sus plantaciones de calabaza cubiertas de una sustancia negra y viscosa que cayó con la lluvia contaminada.

Su suegro, Diosdado Vera, de 89 años, también dijo que teme que sus animales se intoxiquen y mueran porque el agua que les ofrece para beber se contaminó con esa lluvia negra.

El reparto de Versalles de la ciudad de Matanzas estaba igualmente cubierto por el humo proveniente del incendio en la Base de Supertanqueros, según fotos y videos compartidos por el fotógrafo y realizador audiovisual cubano Miriel Santana en Twitter.

También vecinos de la provincia cubana de Mayabeque, que limita con Matanzas, reportaron las primeras afectaciones de la contaminación ambiental generada por el incendio de grandes proporciones: "Las vacas no se quieren comer la hierba y el agua está negra", dijeron.

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