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En medio de la crisis energética que atraviesa el país, el gobierno cubano anunció una subida de salarios para los trabajadores de la Unión Eléctrica a partir de enero de 2025, un premio por su "encomiable labor".
El miércoles, en la sesión de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), el primer ministro Manuel Marrero informó del incremento del sueldo a los trabajadores del sector eléctrico, en reconocimiento a su esfuerzo en circunstancias adversas.
Los bajos salarios de los trabajadores tras adoptarse la política de reordenamiento económico son una de las causas que provocan el éxodo laboral en las termoeléctricas cubanas y la búsqueda de empleo en sectores mejor remunerados.
Unos 15 mil trabajadores del sector eléctrico abandonaron sus puestos en 2021 y 2022 por los bajos salarios percibidos y la derogación de muchos beneficios que recibían antes y que fueron eliminados con la Tarea Ordenamiento.
Pero este es solo uno de los factores que inciden en la grave crisis del país, donde este jueves la Unión Eléctrica pronosticó apagones por un déficit en la capacidad de generación superior a los 1,700 MW.
En su intervención, Marrero calificó la situación del sistema electroenergético nacional (SEN) como de "muy compleja" debido a la falta de divisas que ha causado desfases en los mantenimientos, la recapitalización tecnológica, la ralentización en la actualización de la matriz de generación y la escasez de combustible.
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Como resultado, ha habido una pérdida de capacidad de generación en termoeléctricas. "Se ha producido en los últimos cinco años una disminución en la generación de unos 3731 GWh", precisó.
En los motores a fuel y diésel, la disponibilidad alcanza apenas un 39 % y un 37 %, respectivamente, con tendencia al decrecimiento. La generación móvil también se redujo un 24.2 % con respecto al 2023, mientras que la energía renovable responde actualmente por un 4 % del total.
EL RÉGIMEN APUESTA POR LA ENERGÍA SOLAR, PERO SIGUEN LOS APAGONES
Marrero dijo que se aprobó el programa de gobierno para la recuperación del sistema, conducido por el Comandante Ramiro Valdés Menéndez, para revertir la situación y lograr satisfacer "gradualmente" la demanda de la población y de la economía, con un enfoque de transición y soberanía energética, y el uso eficiente de la energía.
"Hemos recibido propuestas de todo tipo, pero nosotros no podemos privatizar la generación de energía del país. Necesitamos resolver los problemas, pero para que la generación tenga precisamente esa soberanía, tiene que haber también un uso eficiente y racional de la energía", afirmó.
El gobierno ha dado prioridad a dos proyectos de energía solar fotovoltaica de 1,000 MW cada uno. Los paneles solares se adquirieron a partir de la producción del crudo nacional y de pagar con níquel.
El objetivo es que al cierre del primer semestre de 2025 estén aportando más de 500 MW nuevos al sistema, al concluir el año, se conecten unos 1,100 MW al SEN.
Todo ello forma parte de un plan "milagroso" del régimen para la recuperación del dañado sistema eléctrico nacional, con el fin de ofrecer una solución definitiva, y a largo plazo, a la crisis que afecta al país.
Según el Ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy, es un plan "para buscar alternativas y soluciones sostenibles", el cual "tiene que ver con nuestra capacidad de generar electricidad, con nuestros medios, nuestros recursos y capacidades"; algo que parece más una promesa inalcanzable que una posibilidad.
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