Docenas de habitantes de un parque de caravanas o casas rodantes (trailers) situado en Florida City deberán abandonar la propiedad el próximo miércoles, anunciaron las autoridades de la ciudad a través de una carta a los residentes.
La mayoría de los habitantes de ese terreno de 15 acres, localizado en el 601 de la tercera avenida del noroeste de Florida City, son personas de bajos recursos, inhabilitados o que simplemente se han quedado sin empleo tras la pandemia del coronavirus.
Varios de los residentes en el lugar detallaron sus circunstancias a una periodista de la cadena América Tevé. Entre ellos, la señora Mirta García, de 86 años, que vive en el lugar hace más de una década y asegura que lo único que tiene son esas cuatro paredes de su trailer y una camioneta que la lleva al supermercado.
Otros residentes del campo, donde se juntan más de 70 "casas", comentaron que aunque en la entrada de la propiedad se anunció que estaba en venta, no fue sino hasta el pasado jueves que se les informó que tenían una semana para desalojar.
En este momento, la ciudad espera cerrar la compraventa del terreno por 6.8 millones de dólares, pero la condición es que se encuentre desocupado.
La oficina del alcalde Otis Wallace indicó telefónicamente a América Tevé que nadie será arrestado y que tampoco desconectarán los servicios públicos.
Los residentes de ese terreno pagan una mensualidad de 400-450 dólares, que incluye la cuota por los servicios de agua y electricidad.
Entre los habitantes del lugar hay personas con niños, varios enfermos, y muchos de ellos tienen los trailers sin ruedas o afectados por el huracán, y no pueden moverlos. Algunos sólo están pidiendo que las autoridades les den 90 días para abandonar el terreno.
En agosto del año pasado, los comisionados de la ciudad aprobaron la rezonificación del sector para construir una zona residencial de apartamentos y también un hotel de 150 habitaciones.
Actualmente una ley federal protege a los residentes afectados por el COVID-19 contra el desalojo. Pero este no es el caso, puesto que el terreno fue comprado por un nuevo propietario.
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