La represión en Cuba sigue extendiéndose hacia los sectores más jóvenes y creativos del país. En esta ocasión, el blanco han sido dos artistas urbanos: Carlos Alejandro Campos Cruz, de 20 años, y Ernesto de Jesús González Fleitas, quien aún no ha cumplido los 18.
Ambos fueron citados por la Seguridad del Estado y sometidos a interrogatorios y amenazas, luego de lanzar una canción de trap en la que criticaron duramente el reciente aumento de tarifas de la Empresa de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA).
El tema, que se ha viralizado en redes sociales, recoge el sentir popular sobre el abuso económico que representa el nuevo esquema tarifario de ETECSA.
En su letra, los jóvenes denuncian el costo desproporcionado del acceso a internet, ironizan sobre el precio de los paquetes de datos y critican que muchos servicios ahora exijan pagos en dólares o mediante recargas desde el exterior.
“Cambio mi casa por un paquete de datos / Y una hora en Nauta Hogar por este par de zapatos”, dice uno de los versos del tema 'ETECSA HOODTRAP', que se ha viralizado entre jóvenes y usuarios cubanos de redes sociales.
Tras subir el video a sus redes sociales, los dos muchachos fueron detenidos y tratados como si fueran criminales por el simple hecho de expresarse, denunció en una directa el periodista Mario J. Pentón.
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Según vecinos que pidieron el anonimato por temor a represalias, agentes de la Seguridad del Estado los arrestaron con violencia y los condujeron a una unidad policial, donde fueron interrogados y amenazados. Además, en un intento claro de amedrentarlos y silenciar su voz, les advirtieron que serían responsables de cualquier incidente que ocurriera en dependencias de la empresa estatal.
Este hecho no es aislado. Llega en medio de un creciente malestar social provocado por el tarifazo de ETECSA, que ha sido duramente cuestionado por usuarios dentro y fuera del país. Desde su aprobación, varios sectores de la sociedad civil han expresado su descontento con los nuevos precios. Académicos, activistas, artistas, y hasta colectivos universitarios han alzado su voz.
La Federación Estudiantil Universitaria (FEU) de la Facultad de Psicología de la Universidad de La Habana publicó un inusual comunicado donde expresaba su rechazo a la medida, calificándola de "excluyente y elitista".
El descontento ha obligado incluso a las autoridades a pronunciarse. La presidenta de ETECSA defendió el incremento con un argumento que encendió aún más la cólera de los usuarios, indicando que existe un “mercado en el exterior” interesado en mantener la comunicación con sus familiares dentro de Cuba.
Por su parte, la ministra de Comunicaciones declaró que las opiniones de la población estaban “siendo valoradas”, aunque sin ofrecer medidas concretas para revertir el tarifazo.
Mientras tanto, las amenazas contra Campos Cruz y González Fleitas confirman el patrón de represión sistemática contra la disidencia artística y juvenil. No es la primera vez que el régimen cubano intenta acallar las críticas mediante el hostigamiento policial.
En los últimos años, decenas de artistas y creadores independientes han sido objeto de detenciones arbitrarias, citaciones ilegales y campañas de difamación por parte de los medios oficiales.
En este contexto, las redes sociales y la prensa libre en el exilio se han convertido en el principal refugio para denunciar estos atropellos. El caso de estos jóvenes ha generado una ola de solidaridad entre usuarios, artistas del exilio y organizaciones de derechos humanos, que exigen el cese inmediato del acoso policial y la garantía del derecho a la libre expresión.
La dictadura cubana, señaló Pentón, no teme a las armas extranjeras, sino a los jóvenes valientes que se atreven a decir la verdad. Con una canción grabada desde la precariedad, Carlos y Ernesto lograron poner en evidencia la incoherencia de un sistema que exige sacrificios a un pueblo que vive entre apagones, hambre y censura.
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